
La PNP investiga la extraña muerte de una mujer, cuyo cadáver fue encontrado sobre la cama de una vivienda en el distrito San Miguel, donde durante la noche y la madrugada estuvo bebiendo licor en una actividad profondos en favor de un familiar.
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Ante la presunción que se trate de un crimen, su actual pareja y un amigo de éste fueron intervenidos y trasladados a la División de Homicidios de la Dirincri para las investigaciones.
Fue el hijo mayor de Adriana Franco Soto (28), un niño de 7 años, quien descubrió el cuerpo sin vida de la mujer que se encontraba acostado sobre la cama y cubierto con una frazada.
Sus gritos llamaron la atención de los vecinos que llamaron a la policía.
Tras las investigaciones supieron que había estado tomando licor con Alexandre Mora Molina y un amigo, de nombre Henry en el inmueble de la calle Ladislao Espinar N° 183.
Los agentes no tardaron en ubicar a Mora Molina, quien aseguró que durante la madruigada su amiga sufrió una caída y y junto con Henry la acostaron sobre la cama y se retiraron de la casa.
"Noté que estaba fría, pero igual nos retiramos con mi amigo porque teníamos que trabajar temprano", dijo Alexandre a la policía.
Sin embargo, el hijo de la víctima aseguró que este sujeto le dio a la madre, una pastilla para la presión y que ésta le habría provocado la muerte.
Tras los exámenes de ley, se determinó que Adriana Franco habría fallecido a causa de un edema cerebral, aunque las causas estaban por determinar.
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