"He tenido la oportunidad de darle un gran regalo a mi hijo y es su vida". "Ningún padre se negaría a entregar la vida a su hijo para salvarlo".
Así habla el humilde bodeguero Sergio Mayorca, un papá a prueba de balas, que le donó un riñón a su hijo para salvarle la vida. Esta es su historia.
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Cuando José Mayorca tenía 14 años le diagnosticaron un problema renal. Desde hace 4 años fue sometido a una hemodiálisis que le prolongó la vida.
Sin embargo, su única salvación era el trasplante de un nuevo riñón.
José tiene ahora 22 años y pese a la dolencia no descuidó sus estudios ni el trabajo. Es por eso que para las sesiones de hemodiálisis acudía al último turno que duraba hasta las 2 de la madrugada. En todos esos momentos, su padre lo acompañaba.
GRACIAS POR SIEMPRE, PAPÁ
"Al salir de cada sesión, mi padre siempre me esperaba con una sonrisa, siempre me apoyó, y hace unas semanas decidió donarme uno de sus riñones, por eso le estoy muy agradecido y sé que siempre podré contar con él”, contó José entre lágrimas.
NINGÚN PADRE SE NEGARÍA
“Uno ve el sufrimiento de un hijo que está supeditado a una máquina 3 veces a la semana, durante 3 o 4 horas y salir mal. Ningún padre se negaría”, dijo el donador a las cámaras de Latina.
La complicada intervención se realizó en la Unidad de Trasplante de Riñón del Hospital Edgardo Rebagliati Martins, de Essalud, donde un equipo multidisciplinario de especialistas logró, tras más de 8 horas de cirugía, realizar el trasplante.
La doctora Elsa Berrios, jefe de la Unidad de Trasplantes sólidos del hospital Rebagliati, resaltó que esta exitosa operación se dio gracias a Sergio Mayorca, que con mucha determinación tomó la decisión de brindarle mayor calidad de vida a su hijo,
Presidenta de Essalud, Virginia Baffigo, se conmovió con el caso en el hospital Rebagliati
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