La jueza suprema Janet Tello Gilardi, que iba a emitir el voto dirimente en el caso Miriam Fefer, empresaria asesinada en el 2006, decidió inhibirse hoy del proceso argumentando que los cuestionamientos hacia su persona han afectado su imagen y prestigio.En la audiencia pública, que tuvo presente a Eva Bracamonte, condenada por el asesinato de Fefer, Tello acusó al abogado de Eva, José Urquizo, de promover mediáticamente las sospechas de su imparcialidad.Basado en un informe de prensa, Urquizo presentó el 16 de agosto una recusación contra Tello señalando que su esposo, Martín Ugarriza Wetzell, es primo hermano de Jesús Wetzell Gayoso, abogado de Pinkas Flint en el caso. Flint fue citado antes como testigo por su cercanía con Miriam Fefer y habría sido su patrocinada y pareja, según informe policial."Dado el contexto mediático promovido por el abogado defensor de la procesada Eva Bracamonte (...) resulta improbable inspirar confianza en la colectividad sobre la decisión que, como jueza dirimente, pudiera adoptar (...) Se ha afectado el principio de imparcialidad. Por estas razones, resulta prudente mi apartamiento", indicó.La magistrada rechazó la recusación del abogado de Bracamonte, aduciendo que la afiliación con Jesús Wetzell no afecta el desarrollo del proceso. A Urquizo además le recomendó ceñir su actuación en la defensa conforme a la lealtad, buena fe y código de ética del abogado.Urquizo rechazó lo manifestado por la magistrada y dijo que le responderá por escrito, aunque indicó que, como parte del proceso, sólo han ejercido su derecho sin el uso de adjetivos o juicios de valor que perjudiquen la honorabilidad de la jueza.Indicó que la Corte Suprema de Justicia deberá designar próximamente un nuevo magistrado para emitir una sentencia final en el caso Fefer, donde hay un fallo dividido. Mientras tanto, Eva Bracamonte seguirá en prisión.
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