Una seudo médico es acusada de utilizar un spa para colocar aceite de avión y hacer otras intervenciones a varias pacientes que terminaron con secuelas en el cuerpo.
Eva tiene 32 años, hace 8 se operó el busto en un spa que en ese entonces se llamaba Anthonys, pero hace dos empezó con dolores de cabeza y dolores en el pecho, por lo que tuvo que acudir a un hospital. Ella asegura que la responsable de haberle inyectado el llamado aceite de avión es la seudo médico Lourdes Garriazo Zapata.
Pero no es la única con secuelas en el cuerpo debido a este producto. Mayra Mendoza también está afectada. El 24 de julio se realizó una lipolaser. La grasa extraída de su cuerpo se la colocarían en sus glúteos, pero no fue así. Le inyectaron, según ella, aceite de avión. Cuatro días después de la intervención tuvo que ser llevada de emergencia a un hospital donde le salvaron la vida, quedándole como un mal recuerdo una extensa cicatriz en su cuerpo.
Karla es otra víctima de Garriazo. A ella le realizo también una lipolaser. La grasa extraída en teoría se la colocarían en sus glúteos, pero según ella, le inyectaron aceite de avión. Una cuarta víctima es una mujer que se hace llamar norma.
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Garriazo al ser requierda por los medios en su local, así como como vía telefónica, para recoger su versión, no respondió. El otro denunciado Luis Enrique Omonte médico que labora al lado de ella, también se excusó de no declarar.
El 2014, la policía ya había intervenido a la seudo médico Garriazo por realizar esta ilegal practica al no ser médico cirujana. Cuatro años después, la justicia al parecer hizo oídos sordos a las denuncias de ese entonces y ahora lamentablemente vemos las consecuencias.
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