Ante los ataques que Keiko y Kenji han sostenido en los últimos meses, el ex presidente Alberto Fujimori tuvo que intervenir para solucionar el conflicto que envuelve a sus dos herederos políticos y ha resultado por debilitar a su partido.
Según el diario La República, el ex dictador condenado por violaciones a los derechos humanos en los casos Barrios Altos y La Cantuta buscó, por separado, a la lideresa de Fuerza Popular y al congresista que lidera los autodenominados 'Avengers' para disuadirlos en las acciones de agresión que iban a realizarse mutuamente.
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Así, Alberto Fujimori habría logrado que su hija, Keiko, ordenará al congresista Moisés Mamani no entregar el audio de la conversación con el expresidente Pedro Pablo Kuczynski (PPK), donde se negociaba una compra de votos a cambio de otorgar obras para su región.
Ello, sin duda, iba a perjudicar a Kenji pues, en otro vídeo, se observa su participación junto a su colega Bienvenido Ramírez por tratar de convencer a Mamani para que no vote por la vacancia de PPK en el Parlamento en diciembre pasado.
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La siguiente tarea del ex dictador tuvo que ver con Kenji. Fuentes cercanas al legislador, indicaron que Alberto Fujimori le pidió a su hijo no presentar pruebas al fiscal José Domingo Pérez sobre el nexo entre Keiko y la constructora Odebrecht.
Después de intensos días de dialogo, Kenji aceptó la petición de su padre y, el pasado lunes, cuando se presentó ante el fiscal Pérez, no brindó mayores aportes en la investigación por lavado de activos que se le sigue a su hermana por recibir dinero de la firma brasileña para su campaña electoral del 2011. Así el blindaje entre Keiko y Kenji quedó confirmado.
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