La increíble historia de las 'Reynas del Tacacho': madre e hija conquistan Lima con su sazón

El amor de madre no tiene límites. Nuestras queridas mamás hacen lo imposible para darnos lo mejor y así sacarnos adelante. Una historia que nos habla de todo este amor incomparable es de Elena Japa Tarazona (60), quien con una parrilla prestada y un puesto pequeño logró sacar adelante a sus 7 hijos y convertirlos en profesionales.

Aunque la historia pareciera fácil de lograr, esto no es así. Pese a que en un inicio tuvo que sacar adelante sola el pequeño negocio que tenía en el mercado de su pueblo, una de sus hijas decidió acompañarla en esta aventura, para así poder convertirse en la ‘Reynas del Tacacho’, esto debido al sazón único que tienen sus platos selváticos que cualquiera que los haya probado queda cautivado.

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Cuando se trata de comida, los peruanos somos bien exigentes con la sazón, sin embargo, esto no es un obstáculo para Elena y su hija Vilma (30), debido a que diariamente su público les piden muchos tacachos, cecina, juanes. Asimismo, también haciendo platos como anticuchos, salchipollo, mollejitas, han podido ganarse el corazón de sus comensales. 

Pero como toda historia de éxito, también existe un momento en que todo va mal, hasta el punto de querer dejar lo que estás haciendo debido a las cosas malas que llegan a pasar. Elena y Vilma comentan que hubo un momento en el que lastimosamente no se vendía nada, también se dieron estafas con dinero falso.

Asimismo, Elena tuvo que ver cómo sus hijos poco a poco fueron a perseguir sus sueños a la capital, todo esto gracias al negocio de venta de comida que ella tuvo. “Con el negocio de la venta de comida logré que mis hijos terminen la secundaria y venta a lima estudiar”, comenta con una sonrisa orgullosa Elena. 

Decide decir adiós a su negocio

Debido a que ya no tenía la compañía de sus hijos, en especial de Vilma, Elena decide cerrar el negocio y vender el pequeño local que logró hacer terminar la secundaria y a su vez mandar a sus hijos a la capital para poder estudiar en la universidad.

Elena no dijo ni avisó nada a sus comensales, solo un día dejó de abrir y desapareció del mercado de la zona, en el cual había conquistado no solo el estómago de su clientela, sino también sus corazones. En ese tiempo, la madre luchadora solo se dedicó a ayudar a su esposo en la agricultura.

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Trae la sazón de su madre a Lima

Vila una de las hijas de Elena que le apoyó en su negocio en su natal Tocache, decide poner el negocio de su madre en Lima, esto luego de sentirse inconforme con los trabajos que tenía que hacer. Antes de aventurarse, tuvo que esperar unos años para poder abrir dicho negocio junto a su esposo.

Actualmente, son un boom en Santa Anita, y ya no solo tienen un pequeño puesto, sino un gran local conocido como ‘Shicshirabo de Tocache’, en el cual diariamente lo visitan muchas personas para así conocer la sazón de Elena. 

Asimismo, debido al ingenio y creatividad que tienen madre e hija, han logrado fusionar la comida de la selva y de Lima, para así crear pollo a la brasa con tacacho, chicharrón de pollo con juane.

Pese a que al inicio de esta aventura ya no en Tocache, sino en Lima fue algo duro y difícil de comenzar, Elena y Vilma han logrado consagrarse como ‘Las Reynas del Tacacho’. Una historia que comenzó con el amor de madre que tenía Elena hacia sus hijos, a los cuales quería sacar adelante.