Crisis en la frontera: Policía tuvo que contener a estampida de migrantes

La violencia se reavivó ayer en la frontera de Perú y Chile. Desde hace 15 días, el límite entre ambos países (a la altura de la carretera Panamericana) se ha convertido en un campamento de migrantes que reclaman ingresar al territorio. Ayer decenas de ellos, cargando maletas. junto a niños, corrieron a través de la pampa para lograr su objetivo sin temor a la represión policial.

Los extranjeros que llegan a la frontera afirman que dejan Chile por el desempleo, por los operativos contra migrantes en condición irregular o porque cansados de vivir en condiciones difíciles, desean volver a sus hogares. La Policía peruana forma a diario un cordón humano para impedir el paso de los migrantes, quienes no cuentan con los requisitos para su ingreso regular al Perú.

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Ayer un grupo de colombianos comenzaron a asuzar al grupo que estaban al lado de la carretera. Venezolanos que recién llegaban se les unieron y bloquearon la vía, insultando y lanzando piedras a los policías. Ante ello los agentes que estaban en las pampas se acercaron para reforzar la seguridad en la pista, fue entonces que tres personas corrieron hacia el arenal, hacia el lado de la playa, para cruzar a territorio peruano en las narices de la Policía.

En medio de los gritos y la confusión, otros migrantes se sumaron generándose una estampida. Los policías corrieron detrás de los extranjeros y se oyeron tres disparos al aire. El coronel Ramón Ramos Canila, Jefe de la División de Orden Público y Seguridad de la Región Policial Tacna, negó que se realizaran disparos y argumentó que lo oído fue el choque de piedras contra los escudos de los policías.

Intervenciones

Ramos afirmó que lograron intervenir a 86 personas que habían ingresado a territorio peruano. Insistió en que la Policía Nacional está preparada para contener a los migrantes, pero las imágenes de los policías corriendo detrás de los migrantes muestra que carecen de vehículos para cruzar el desierto de forma rápida.

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Las cosas no se calmaron tras el fin de la estampida. Los migrantes que retornaron al límite (en territorio chileno) bloquearon la carretera por una hora. Los varones se apostaron en el carril que conduce a Chile, y las madres y sus niños en el carril de ingreso a Perú. Finalmente fueron los carabineros (policías) quienes desbloquearon la pista y la calma volvió a la zona pero la crisis humanitaria persiste.