Miles de personas suben al cerro San Cristóbal en el distrito del Rímac en Viernes Santo

El cerro San Cristóbal es uno de los principales atractivos turísticos de Lima, sin embargo, en Semana Santa cobra mayor importancia debido a que miles de devotos suben a pie hasta su cima para visitar la Cruz Monumental.

Ante ello, miles de devoto desde horas de la madrugada han podido hacer su recorrido para poder llegar hasta la cima de este cerro que está ubicado entre los distritos del Rímac y San Juan de Lurigancho, es visitado en esta semana religiosa.

"Vengo del distrito de Independencia y desde las 4:30 a.m. iniciamos junto con mis hijas el recorrido al Cerro San Cristóbal, todos los años lo hacemos para dar gracias al Señor porque él se sacrificó por nosotros en la cruz y eso significa mucho para mí", contó una madre de familia par RPP Noticias.

No hay seguridad

Se resalta que poder subir al cerro San Cristóbal es un gran sacrificio que llegan a hacer miles de fieles, no obstante, ante la falta de seguridad en la zona hace que esta caminata sea aún más difícil de realizar.

La inseguridad en la zona se da debido a las escaleras en mal estado, otras muy empinadas y, en algunos tramos, la ausencia de estas. Además de que las barandas en la zona superior del cerro se encuentran rotas, carcomidas y, en ciertas zonas, están ausentes, lo cual es un peligro para ciertas personas.

Asimismo, otro problema es que, tras la visita de miles de fieles, llegan con alimentos, velas, flores y entra otras cosas más, con lo cual se puede observar gran cantidad de basura, entre botellas, papeles y otros residuos regados por todo el lugar.

Historia del Cerro San Cristobal

Este cerro se ha convertido en esta última década en un sitio para hacer turismo dentro de Lima, el conocido cerro tiene un pasado histórico, ante ello te contaremos la leyenda de este lugar santa para miles de devotos.

Según cuenta la leyenda el portal de "Mr. Dandi", en el año 1536, Francisco Pizarro y cerca de 500 soldados se enfrentaron a veinticinco mil guerreros nativos quienes pensaban apoderarse del centro de la ciudad, sin embargo, cada vez que intentaban cruzar el Río Rímac, eran arrasados por la fuerte corriente y perecían en el acto.

No obstante, una mañana los españoles gritaron: "¡Milagro de San Cristóbal!" y tras esto, organizaron una caminata hacia la cumbre del cerro donde construyeron una capilla y colocaron una enorme cruz de madera.

Pese a la colocación de esta cruz, la cruz fue derribada por otro grupo de indígenas, pero con el pasar del tiempo se llevó una gran batalla entre ambos. Tras obtener la victoria, Francisco Pizarro ordenó a sus hombres: "Que se ponga él otra cruz como la que los Indios nos quitaron". Fue así que el cerro pasó a llamarse "San Cristóbal" porque en ese día se ganó la batalla.

Otro detalle de este cerro es que mucho antes de su conquista, los antiguos peruanos subían a la cima del cerro para ofrecer ofrendas y sacrificios a sus dioses, por otro lado, los Españoles y sus Misioneros lo hacían rezando el Vía Crucis y rememorando las estaciones de Jesús.

Ante esta última acción por parte de los españoles, esta tradición continua con los miles de católicos que van especialmente en Semana Santa se visita la cima para poder ver la cruz.