Zorrito Run Run podría salir del Parque de Las Leyendas para irse a su hábitat natural

Buscan su libertad. El Instituto Peruano de Asesoría Legal del Medio Ambiente y Biodiversidad (Ipalema), presentó una demanda de amparo contra el Servicio Nacional Forestal (Serfor) y la Municipalidad de Lima (MML), a fin de que el ya reconocido zorrito Run Run pueda salir del Parque de las Leyendas y retorne a su hábitat natural.

Como se recuerda, el zorrito, víctima del tráfico de animales, fue capturado el pasado 9 de noviembre en Comas por el Serfor, luego de pasar durante varios días dentro del vecindario Sol Naciente, tras escapar de una familia que lo compró por 50 soles pensando que era un perro siberiano.

Posteriormente a su captura, el animal silvestre fue trasladado hasta el Parque de Las Leyendas, donde se le puso en cuarentena para evitar una posible transmisión de virus a otros animales. Luego de ello, diversas organizaciones sociales realizaron vigilias para que no sea encerrado en dicho zoológico.

Ante ello, y basándose en la Ley de Fauna Silvestre, el Ipalema presentó una demanda ante el Juzgado Constitucional de Lima para que el zorro pueda ser reinsertado en su hábitat natural.

De acuerdo a la presidenta de la institución, Sonia Córdova Araujo, la decisión de Serfor de encerrar a Run Run en el Parque de Las Leyendas fue un grave error, ya que, sostiene, descartaron “cualquier tipo de reinserción a un medio natural controlado, pero sin barreras físicas como un Centro de Rescate o un Centro de Conservación de Fauna Silvestre”.

¿Qué dice la Ley de Fauna Silvestre?

Según precisa el artículo 95 de la norma, estos centros de conservación de fauna silvestre, como el zoológico en mención, son “instalaciones, públicas o privadas, para el mantenimiento en cautividad de especies de fauna silvestre amenazadas con fines de protección, conservación, reintroducción, reinserción, repoblamiento o reubicación”, la cual debe ser aprobado por Serfor.

Sin embargo, ante la captura de un animal silvestre vivo, como el caso del zorrito Run Run, se debió actuar priorizando la liberación y no el encierro sin tomar en cuenta los aspectos ecológicos, distribución natural, salud pública, salud ambiental y la salud animal.

“Conforme a este precepto normativo, la autoridad de fauna silvestre no ha debido optar como primera opción el reclutamiento de Run Run en un zoológico, pues esta opción de vida en cautiverio solo procede en defecto de que se descarte la posibilidad de retornar al animal a su hábitat natural o algún Área de Manejo de Fauna Silvestre en Libertad, lugar que si bien puede no ser su hábitat del cual procedió, es un sitio donde puede vivir en libertad sin barreras físicas, pero un lugar controlado por un plan de manejo supervisado por el Estado” indica la demanda.

En ese sentido, el Parque de las Leyendas no sería el lugar adecuado para Run Run, porque esta instalación tiene como fin el entretenimiento y la educación, mas no la reinserción de animales rescatados, de acuerdo a lo que menciona la demandante.

“Al ponerlo en un Zoológico han condenado al zorrito Run Run a que sea objeto de nuestra curiosidad y morbo, un objeto más de exhibicionismo”, manifiesta el escrito, agregando que el encierro del zorro en dicho zoológico solo podría causar su “sufrimiento y ansiedad”. “El desarraigo, la soledad y el aislamiento en un sitio con barreras para un animal es uno de las peores formas de maltrato”, asevera la demandante.