Melgar debe imitar a Cienciano de Freddy Ternero

Por Ramiro Velazco Bustinza (Editor)   

Hoy, todos festejan a Melgar, se deshacen en elogiar a Reynoso y a destacar uno por uno a los jugadores, ponderan sus aciertos y casi nadie ve los errores o las cosas por corregir. Al revés, es como cuando alguien muere, en vida casi nadie le dedicaba loas, pero muerto, todos dicen que fue bueno, correcto, humilde, luchador, una buena persona.

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El fútbol es así también, lamentablemente. Pero el título del equipo arequipeño ya fue. Merecido por donde se le mire. Y punto. Nosotros en el Perú no debemos estacionarnos en celebraciones ni creer que hemos dado un paso gigante, como necesitamos a gritos. Tenemos tantas deudas en cuanto a títulos, que los pocos que hemos conseguido se pierden como un grano de arena en la playa. No somos Argentina, Uruguay, Brasil, ni siquiera Ecuador o Colombia. Cienciano con dos títulos es nuestro -digamos- estandarte. ¿Y después...? Nada, cero. 

Por eso, sobre la marcha nomás, Melgar, con mayor dedicación inclusive de su título nacional, debe comenzar a planificar no solo el campeonato del próximo año, sino, y sobre todo, lo que será su participación en la Copa Libertadores, a la que asistirá como campeón peruano. Esto incluye, sobre todo, mantener a sus figuras y contratar otras que sumen y multipliquen el potencial del equipo.  

Ojalá no sea un ave de paso, un debut y despedida y que en la etapa de grupos nomás le digan "arranca, arranca" y quede eliminado, como el 99 por ciento de equipos nacionales que lo han antecedido en el principal torneo de clubes de esta parte del continente. 

El propio Melgar lo hizo en sus dos participaciones, muchas veces incluso se dejó robar lo puntos de su propia casa y afuera fue una lágrima. 

El Dominó (sus dirigentes en primer término) debe proyectarse hacia otra galaxia, a otras  latitudes del certamen poco explorada por nuestros equipos. 

Nuestros representativos no despegan de la superficie terrestre (del Deporte Rey). Son como los prototipos de aviones de fines del siglo XIX, que apenas comenzaban a volar se venían abajo. 

Esos ensayos, en este caso, sirvieron de mucho y originaron las aeronaves que hoy por hoy se pasean por el mundo entero.  

Hago votos porque Melgar rompa el molde, copie o casi al menos lo que hizo Cienciano la década pasada en la Sudamericana y al Recopa. 

En todo caso, nada será diferente sino igual o peor. Un fracaso más. La directiva, Reynoso y los jugadores seguro que no quieren que así sea. Entonces a trabajar se ha dicho. Y que todo salga bien, como para sacar pecho y los arequipeños, se sientan más orgullosos aún de su centenario equipo. Suerte.