Mucha calle: ¿Crías un pitbull?

Cuando el Colorao me mostró el perro que había adquirido como mascota, me entró el susto. Era un pitbull blanco, con algunas manchas en el cuerpo, de cuerpo de barrilete y un cuello grueso. No es que sea un miedoso, pero a esa raza le tengo respeto. Quieran o no aceptarlo los que defienden su crianza en zonas urbanas, es una máquina de matar.

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Por Lucho Camino

Cuando el Colorao me mostró el perro que había adquirido como mascota, me entró el susto. Era un pitbull blanco, con algunas manchas en el cuerpo, de cuerpo de barrilete y un cuello grueso. No es que sea un miedoso, pero a esa raza le tengo respeto. Quieran o no aceptarlo los que defienden su crianza en zonas urbanas, es una máquina de matar. 

Claro está que sus defensores dicen que todo depende del dueño y de las enseñanzas que se les dé a estos canes para reducir las dos cosas que lo vuelven violento: el estrés y el estado de alerta que antecede al ataque. 

“Mejor cambia de perro, causita”, le dije. “Con estos perros nunca se sabe. Además, tú no paras en tu casa por el taxi, no vaya a ser que se loquee y termine mordiendo a un vecino o alguien de tu familia”, le recomendé. 

Unos meses después, el Colorao le donó a la policía su mascota. “Luchito, tenías razón. Tal vez debes comprar el pitbull cuando es cachorrito para enseñarle cosas. Yo ya lo compré de varios meses, seguro de que lo tenían encerrado porque cada vez que comía se ponía muy agresivo. Casi le saca la mano a mi sobrino”, me contó. 

Recordé esta anécdota apenas escuché en la radio de mi taxi que un pitbull había atacado a un niño de tres años, desfigurándole el rostro. El animal estaba atado a un árbol en un parque y comía algo. El niño lo vio y en su inocencia, quiso acercarse para jugar con el perro. Y todo se hizo gruñidos, llanto, sangre y tragedia. 

En las redes sociales, hay quienes defienden al pitbull. “¿Dónde estaba la mamá? Debía estar cuidando a su hijo. El perro no tiene la culpa”, repiten. Otros responsabilizan al dueño: “Si sabía que su animal era agresivo, debió darle de comer en el patio de su casa. A la calle es mejor sacarlo con bozal”. ¿Quiénes tienen la razón?

Lo que está claro es que el Perú es tierra de nadie. En otros países, el pitbull es calificado como un animal potencialmente peligroso. Donde no está prohibida su crianza, existen reglas claras para su tenencia. La primera, nunca pasearlos sin correa y bozal.  

El pitbull es un cruce de razas. Empezó cuando se buscó una que sea cada vez más agresiva, con mayor fuerza y bravura. ¿Con qué finalidad? Primero para la caza. Luego para las peleas de perros o las competencias de resistencia con canes.  

Se cruzaron bulldogs con terriers. Luego fueron afinando la búsqueda. Por eso, soy de las personas que creen que los pitbull no deben ser criados en casas. La noticia del niño atacado no es novedad. Y seguiremos viendo estos casos si no hacemos nada.

muchacalle.elpopular@gmail.com

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