Eloy Seclén lanza el libro "Vuelven Los Mochicas"

Dicen en el norte que la guitarra nunca olvida a quien fue su compañero. Las 380 páginas del libro Vuelven Los Mochicas (Polisemia & Huerequeque, 2020) son la feliz comprobación de este adagio popular.

El autor de esta novedosa publicación es el periodista sanmarquino Eloy Seclén Neyra, quien a través de la técnica sociológica de la historia de vida rinde homenaje a la trayectoria musical de su padre, don Nicolás Seclén Sampén,  director del recordado grupo Los Mochicas. Esta formación chiclayana difundió por más de 60 años ritmos como el golpe tierra, el tondero, las chiquitas o serranitas, así como valses, pasillos y marineras.

Vuelven Los Mochicas presenta la historia de don Nicolás a través de doce de sus canciones. En ellas encontraremos el testimonio de los distintos integrantes de la agrupación, así como compositores, familiares y académicos. Con ellos se construye un relato de identidad lambayecana, una elaboración de memorias que se inserta en la tradición de la música popular, particularmente la del norte de nuestro país.

«Las canciones de Los Mochicas expresan un sentido de pertenencia, una posibilidad de encontrarnos y fortalecernos. Nos hemos acercado a la historia de la música criolla no con un ánimo hagiográfico sino construyendo una memoria colectiva de lo que conocemos como el estilo norteño», nos dice Eloy Seclén. Consecuentemente, el libro cuenta con la participación de la artista Fátima Ordinola, quien ha tenido el trabajo de ilustrar clásicos de la canción popular como “El guayacán”, “Caballito de totora”, “Las alforjas”, “Mis algarrobos”, “El Cholo Cadenas”, entre tantos temas que evocan ese tradicional grito Achica, achica, ¡Mochica!

El libro se encuentra a la venta en la librería Communitas y en la librería El Virrey de Miraflores. Asimismo, está disponible en la Librería del Centro (Jr. Camaná 912) y la librería Rocinante (Rufino Torrico 899). Los Mochicas, por su parte, siguen siempre disponibles en su página de Facebook, y en el corazón del pueblo, por supuesto.