Fernando Sánchez, golero del campeón de la Copa Perú, y su otra faceta como ingeniero civil

En la etapa nacional de la Copa Perú, todos hablaban de las buenas atajadas y calidad del arquero del ADA de Jaén, considerado el mejor del torneo. Pero pocos saben que detrás de Fernando Junior Sánchez Pichardo (30) hay una hermosa historia. Es de profesión ingeniero civil y para participar en la recta final del Futbol Macho tuvo que pedir permiso a sus jefes de la Municipalidad de Chota y realizar trabajo virtual.

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—¿Te graduaste como ingeniero civil?

—Sí. Empecé a estudiar en la Universidad Nacional de Cajamarca la carrera de Ingeniería Civil.

— ¿Era lo que siempre soñabas?

— Por ahí alguien me dijo que estudie Medicina, pero no me gustó. Desde escolar, soñaba con ser ingeniero civil.

— ¿Cómo lo llevaste?

— Al comienzo me fue bien, pero a mitad de carrera aparece el tema de UTC y se me hizo complicado. El fútbol era un hobby, pero se convirtió en trabajo al contratarme UTC. Los docentes de la universidad no me entendían, no me dieron la mano para llevar las dos cosas paralelas.

— ¿Tanto así?

— Dejé los estudios dos años para dedicarme al fútbol. Después, retomé los estudios y terminé la carrera, en el 2019, jugando Copa Perú.

— ¿Comenzaste a trabajar en lo tuyo?

— Pasó lo de la pandemia y no había Copa Perú. Me dediqué a trabajar. Con los cambios que hubo en la Copa Perú, pude jugar nuevamente y estuve en Celendín.

— ¿Cómo hiciste con tu trabajo y para jugar la etapa nacional de la Copa Perú?

— Estuve trabajando en la Municipalidad de Chota hasta medio año y, al llegar la etapa nacional, mi jefe y alcalde me dieron las facilidades para irme a Jaén y jugar por ADA.

— ¿Te dieron licencia?

— Nada eso, estuve realizando en Jaén trabajo virtual. Es más, cuando terminó el partido con San Marcos y nos proclamamos como campeones, recibí el llamado de los ingenieros para felicitarme.

— ¿En qué consiste tu trabajo?

— En la Municipalidad de Chota, trabajo en la Gerencia de Infraestructura. Como asistente, mi labor consiste en visitar obras, ver liquidaciones, temas de pagos, inspecciones de campo por diversas solicitudes y registro de todos los proyectos que se vienen ejecutando.

— ¿Y ahora qué viene para ti?

— Ahora que terminó la Copa Perú, regresaré a mi trabajo en Chota o ver si ADA quiere seguir contando conmigo. El 9 de diciembre, cumplo 31 años y me dedicaré a seguir viendo videos motivacionales y de superación.Muy dedicado

— ¿De dónde eres?

— Nací en Lima, pero desde los 3 años me crie en Chota. Estudié en el colegio emblemático de la ciudad, San Juan de Chota, participaba en los deportes y me gustaban las matemáticas.

— ¿Siempre fuiste arquero?

— Desde niño, era volante y delantero. Cuando estaba en la sub-14, un técnico me dijo que tenía condiciones para arquero y me fue preparando. En la sub-17 hice entrenamientos más específicos de portero.

—  ¿Cómo empieza tu periplo deportivo?

— Estuve en el Municipal de Chota, por temas de estudios, me fui a Cajamarca, al Once Amigos. UTC hizo una prueba donde se presentaron 600 jugadores y quedaron 30 para participar de la reserva. A mitad de año, me suben a primera y firmo mi primer contrato profesional. En el 2013, trabajé con el profesor Gerardo Calero, quien es miembro del comando técnico de Juan Reynoso en la selección. Cuando estaba en Lima, para la semifinales, me llamó. Me dijo que iba a lograr mi objetivo y salí campeón y fui elegido el mejor arquero de la etapa nacional de la Copa Perú.

— ¿Cómo se dio tu pase al ADA?

— Jugaba para un equipo de Chota en la etapa departamental, ganamos en casa 3-2 al ADA y en la vuelta nos ganaron 2-0 y clasificaron. Recibí la llamada de los dirigentes para reforzar el equipo.

— ¿Soñaste ganar la Copa Perú?

— Al comienzo, había un poco de miedo porque anteriormente tres equipos cajamarquinos se quedaron cerca de ascender. Este año, gracias a Dios, hicimos la faena.

— ¿Qué papel cumplió el técnico Roberto Arrelucea?

— Nos fijó las metas, nos motivaba, habló de la parte psicológica y el tema de la gloria si campeonábamos. Su experiencia fue fundamental, nos hizo creer que sí podíamos ser campeones de la Copa Perú y no se equivocó.