Periquito Chiroque recuerda sus vivencias en el fútbol: “No me dejaron ir a la U de Chile y al Flamengo”

Dejó la pelota y hoy se dedica a su otra pasión: la agricultura.  En su natal Morropón, en Piura, William Chiroque trabaja duro labrando la tierra, aprovechando estos días de lluvias para sembrar y esperar de acá a un tiempo una buena cosecha. Periquito hace un alto a sus labores para hablarnos de su presente y recordar sus vivencias en el fútbol peruano.

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— ¿Cómo se encuentra, ya que está lloviendo fuerte en el norte del país?
—Gracias a Dios por acá estamos bien. En otros lados de Piura, como por la sierra, las cosas se han complicado por las lluvias e inundaciones, lo cual ha aislado a algunos pueblos. Es algo a lo que estamos expuestos cada cierto tiempo por la misma naturaleza, que esperemos se calme.

—¿Han perjudicado las lluvias a sus cultivos?
—Esta lluvia nos viene bien porque por esta zona es árida la tierra y hace tiempo que no llovía de esa manera. Estamos aprovechando las lluvias para sembrar maíz y frejol. Esperando tener una buena cosecha más adelante.

—¿Por qué no siguió la carrera de entrenador?
—Luego del fútbol, mi vida es el campo, la agricultura, estar cerca de mi familia. La carrera de entrenador es muy absorbente, demanda mucho tiempo.

—¿Hace la labor de scouting?
—Por acá, hay muchos chicos con talento que deberían ser aprovechados. A algunos los he recomendado para Alianza Atlético, Atlético Grau, Sporting Cristal, para que se prueben y puedan triunfar en el fútbol.

—¿Quién lo descubrió en el fútbol?
—Jugaba en el Sport Pilma. Un día, el profesor Hugo Córdova me vio jugar y me llevó al Atlético Grau, donde empecé mi carrera en el fútbol y en el que terminé también en 2019, en Liga 2, donde jugué gratis por agradecimiento al club. Uno siempre debe ser agradecido en esta vida.

—¿En qué club fue más feliz?
—Me siento un agradecido por todos los equipos en los que me tocó jugar, pero donde lo pasé lindo fue en la selección, en la Copa América de Argentina, en 2011. Fue mi mejor momento, me decían ‘pibito’ y tenía 32 años. Estoy agradecido con Dios por ese momento, pero siento que le quedé debiendo al fútbol.

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NO LE DEJARON EMIGRAR

—¿Por qué dice eso?
—Las lesiones me jugaron en contra y siento que pude dar más. Cuando estaba en Cristal, pese a estar lesionado, me quisieron renovar, pero no quise porque no me pareció bien que me paguen y que no juegue.

—¿Tuvo oportunidad de emigrar?
—Jorge Sampaoli, cuando estaba en la ‘U’ de Chile, me quiso, pero tenía contrato con Juan Aurich y la dirigencia no me quiso transferir. Son cosas que pasan. Luego, Flamengo de Brasil también se interesó en mí.

—¿Cómo así?
— Después de ese partido que Cienciano pierde 2-1 con Flamengo en el Maracaná, por Copa Libertadores, en 2008, me enteré de que Flamengo me quería, pero no se dio. ¿Si Juvenal Silva pidió mucho? No lo sé, lo concreto es que seguí en Cienciano. Y hubo algo curioso en ese partido.

—¿Qué cosa?
—Ese día, Cienciano jugó un partidazo y el árbitro (el paraguayo Ricardo Grance) le anula un gol legítimo a Sawa. Cuando acaba el partido, el juez viene, me pide mi camiseta y me pide disculpas. “Perdóname, fue gol, me equivoqué”. Le dije que el error no era solo de él, sino también de su juez de línea.

—¿Algún compañero travieso?
—El Cholito Ccahuantico era un personaje. Era mi compañero de habitación en las concentraciones, en Cienciano, y la pegaba de sonámbulo para darse su escapadita, ya que le gustaba su chelita. Ja, ja, ja.

—Franco Navarro era su entrenador en ese Cienciano.
—Franco, a la hora del trabajo, era bien serio, renegaba. Un día, Chiquito Flores no estaba en la concentración a la hora de la charla técnica, lo fue a buscar y lo trajo cargado. Ja, ja, ja.

—¿Ve la Liga 1?
—Sí, aunque a veces, cuando llueve fuerte, se va la señal de la televisión y caballero a escuchar radio.

—Muchas gracias por su atención.
—Yo soy el agradecido por acordarse de este servidor. Y, antes de finalizar esta nota, desearle lo mejor a Cristal, espero que le gane a Huracán y clasifique a la fase de grupos de la Copa Libertadores.