Marcial Salazar da consejos para triunfar en el fútbol: "La clave del éxito es no ser conflictivo"

Espera que el 2022 también se pinte de blanquiazul. Marcial Salazar, ex jugador de Alianza Lima, aseguró sentirse muy feliz luego del título conseguido por el cuadro íntimo y espera que este año el equipo de sus amores logre el Bicampeonato y realice una aceptable campaña en la Copa Libertadores.

Igualmente, el Charapa que brilló en los años ‘90 con la camiseta blanquiazul y logró el título nacional después de 18 años, elogió el desempeño de Jefferson Farfán y Hernán Barcos, quienes fueron piezas claves para lograr el campeonato.

—¿Qué te dejó el año 2021?

—Muchas cosas positivas en lo personal y esperemos que este nuevo año sea muy productivo en lo profesional que es lo que todos queremos.

—¿Cuánto celebraste el título de Alianza Lima?

—Mucho. El club se lo merecía y todos los que queremos a Alianza, después de lo sucedido el 2020. Al club le fue bien en todo aspecto. Fue puntero en varias fechas y haciendo muy buenos partidos. La recuperación de Jefferson Farfán también fue algo que me alegró mucho.

—¿Cómo calificarías la gestión de los dirigentes?

—Muy bien, pero lo primordial es que los jugadores deben saber que están en una institución grande como Alianza Lima y que merece mucho respeto y mucho trabajo. Es una institución que todas las semanas debe sacar buenos resultados y para eso debes de ser consciente de la responsabilidad en la que estás inmersa.

—¿Crees que en el 2020 no hubo eso en el equipo?

—Creo que no, pero el año pasado el grupo anduvo bien y tuvieron un buen comando técnico que los hace caminar bien.

—¿La llegada de Farfán y Barcos fue un adicional para el grupo?

—Sí, tener a Jefferson Farfán en el club motiva mucho más. Es un jugador diferente y que con el simple hecho de tenerlo a tu costado te genera muchas cosas. Como hincha de Alianza y amigo de Jefferson me alegra su recuperación. Ha puesto su granito de arena para sacar al club adelante.

—¿Cuando llegaste a Alianza, qué jugador te motivaba?

—Conocer al maestro César Cueto y estar rodeado de jugadores como Waldir Sáenz, el Churre Hinostroza, Jayo, entre otros, fue único. Encontrar a un grupo que se trataba como una familia es algo que solo con trabajo se podía retribuir.

—¿Cómo ves a Waldir como comentarista?

—Yo siempre le deseo lo mejor a todos y me alegra mucho que esté en la televisión. He visto algunos programas y va bien.

—¿Es mejor como goleador?

—(Risas) Seguramente. Waldir ha sido un extraordinario jugador, no tuvo buenos partidos con la selección pero en Alianza fue el goleador histórico y nos ha ayudado mucho en obtener muchas cosas.

—¿La jerarquía de Barcos también es digno de resaltar?

—Es muy importante los líderes positivos y Barcos es uno de ellos. Con ellos es fácil que el grupo se mantenga unido y se respete. Pero también hay los otros que quieren hacer daño. El año que campeonamos después de 18 años, el grupo era excelente, todos eran amigos y compañeros.

—¿Es cierto que hay líderes negativos? ¿Cuántos tuviste en tu carrera?

—Muchos, esos líderes no aportan nada. Como jugador a veces uno lo deja pasar, pero ahora como entrenador prefiero dejar afuera a este tipo de personas y quedarme con jugadores que son grandes personas.

—¿Qué es lo que rescatas de los técnicos que te dirigieron?

—Todo. De cada uno aprendí mucho. Siempre rescato lo positivo, desde mi primer entrenador que fue Henry Perales, hasta Zacarías, Chale, Bernales, Pinto y Mosquera que fue mi último entrenador. Con todos ellos compartí muchas cosas y siempre me trataron bien.

—¿La clave para triunfar es no ser un jugador conflictivo?

—Así es. La clave del éxito es no ser un jugador conflictivo, sino ser un jugador que se caracterice por trabajar. Yo era uno de ellos y por eso pude caer bien en todos los equipos donde jugué.

—¿Qué esperas de Alianza para este año?

—Que siga por la senda del triunfo y vuelva a ganar el torneo. También que pueda hacer una buena Copa Libertadores.