“Un Rayo. Matute es una caldera”: Se cumplen 10 años de la goleada histórica de Alianza 4-1 Estudiantes

El aniversario de Alianza Lima son los 15 de febrero de cada año, tradición que se cumple religiosamente en los hinchas aliancistas, pero hay una fecha que desde hace 10 años se recuerda en los corazones de los blanquiazules como si se tratara del onomástico íntimo. Un día como hoy, una década atrás, el equipo de La Victoria derrotó categóricamente al campeón de la Copa Libertadores, Estudiantes de La Plata, quien tenía como uno de sus estandartes a Juan Sebastián Verón.

Para aquella edición de la Copa Libertadores 2010, Alianza Lima llegó como Perú 2 tras caer dolorosamente ante Universitario de Deportes en los play offs del año 2009. Estudiantes de La Plata, por su parte, se había consagrado en el torneo de CONMEBOL e inclusive disputó la final del Mundial de Clubes ante FC Barcelona, estuvo a pocos minutos de consolidarse como el mejor equipo del mundo con gol de Mauro Boselli, pero el cuadro español dio vuelta al marcador con tantos de Pedro (88) y Messi (109).

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Alianza Lima tuvo que olvidarse rápidamente de la dura derrota y se enfocó en la Libertadores, Estudiantes también hizo lo mismo. El primer encuentro de la Copa para los íntimos fue ante Bolivar en La Paz y el cuadro dirigido por Gustavo Costas, en ese entonces, ganó 3-1. Luego llegaría el turno de enfrentar al Pincharrata en Matute.

El entrenador Costas dispuso el siguiente once para ese histórico partido: Salomón Libman; Edgar Villamarín, Héctor Sosa, Carlos Solis; Amilton Prado, Henry Quinteros, Jean Tragodara, Edgar González; Joel Sánchez, Wilmer Aguirre (3) y José Carlos Fernández (1).

El equipo dirigido por Alejandro Sabella mandó a la cancha de Matute su temible once que formó de la siguiente manera: Agustín Orión; Germán Ré, Leandro Desábato, Christian Cellay, Clemente Rodríguez; Leandro Benítez, José Sosa (1), Rodrigo Braña; Juan Sebastián Verón, Enzo Pérez y Mauro Boselli.

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La expectativa para el duelo entre Alianza Lima vs. Estudiantes era altísima, pero todo se oscureció para los blanquiazules al recibir el gol más rápido de la Copa Libertadores a los 7 segundos de iniciado el cotejo. No había pasado mucho tiempo y la algarabía con la que se comenzó el encuentro, de inmediato paso a tener un silencio sepulcral.

Tuvieron que pasar 16 minutos para que la tranquilidad llegue al Estadio Alejandro Villanueva, porque Wilmer Aguirre, quien tuvo una fantástica actuación aquella noche, abrió el camino de la historia con un potente remate venciendo al golero Orión.

La mentalidad de Alianza Lima no fue conformarse solo con empatar ante el vigente campeón de la Copa Libertadores, sino que se dieron cuenta que podían lastimarlo, y así lo hicieron. A 12 minutos de terminar el primer tiempo, Wilmer Aguirre reapareció en escena, burlando la marca de tres hombres rivales, y decretó el 2-1 que se quedaría hasta culminar los 45 minutos reglamentarios.

Con el resultado a su favor, Alianza entró al segundo tiempo mucho más concentrado y le jugaba de igual a igual al subcampeón del mundo. A los 73 del encuentro, otra vez Aguirre burló a Desábato y anotó un golazo en el arco de la tribuna sur, generando el grito de gol en la mitad del país.

"Es un monstruo. Es un rayo. ¡Qué bárbaro! Es imparable", dijo Mariano Closs en su relato. Fernando Niembro agregó lo siguiente: "Un jugador sensacional, qué extraordinaria definición. Ahora, con zurda y fuera del área. A esto se exponía Estudiantes de La Plata, estaba con las pistolas preparadas Alianza y uno de ellas es este jugador de la noche… de la Copa Libertadores. ¡Wilmer Aguirre! ¡Tres goles! ¡La pesadilla de Estudiantes!".

"Es una caldera el estadio (Matute), hace rato que no siento, que no vivo un clima de tanta localía que brama en los distintos sectores del estadio. Te digo (a Fernando Niembro), este estadio es una caldera ya por el alma que tiene su gente para alentar a su equipo", agregó el relator argentino que quedó maravillado por la pasión de los blanquiazules.

Pese a que no le dieron un penal a Alianza Lima, José Carlos Fernández se encargaría de poner la cereza al pastel azul y blanco al convertir un hermoso tanto a los 82 minutos del partido. Ya para ese momento épico, ingresaron Alexander Sánchez, Walter Vílchez, Juan Jayo.

Antes de que el árbitro decrete el final del partido, los hinchas no dudaron en realizar el tradicional "olé". Esa noche jamás será borrada de la memoria de los hinchas aliancistas, quienes esperan con tanto anhelo ver a su equipo apabullar a grandes clubes como Estudiantes de La Plata.