Joel Sánchez: “Puedo jugar en Barranquilla”

Axel Belapatiño PeramásFotos: Carlos Contreras El 22 de enero del 2013 fue suspendido por dar positivo en un control antidoping y más de uno pensó que era el ocaso de su carrera.Pero hoy dos años después, Joel Sánchez Alegría se ha ganado un lugar en el equipo de Ricardo Gareca que jugará las Eliminatorias para el Mundial de Rusia 2018.El “Supercuy” tiene sus dos primeras pruebas de fuego ante Colombia en Barranquilla y con Chile en Lima.“Lito” quiere emular a Gastón Acurio,  pues estudió para ser chef, pero sus amigos de la San Martín lo vacilan, ya que le dicen que fue su esposa quien lo presionó.—Gareca fue tu ángel que te dio la oportunidad de mostrarte internacionalmente...—Tuvo que ver mucho, justo el cambio de entrenador de Bengoechea a Gareca, quien tiene otra visión y eso me permitió regresar. Pero, sabes, nunca pensé que sería tan pronto.—Regresaste dos años después como si nada...—Es que no dejé de entrenar nunca en esos dos años. Volví anímicamente a tope, lo cual es determinante en mi juego. Agradezco a Dios por todo lo que me da.—Estás en la lista de convocados para el inicio de las Eliminatorias...—Uno trabaja para eso. Si el profe (Gareca) decide ponerme en el equipo que arranca en las Eliminatorias, bienvenido sea, sino estaré para apoyar cuando lo requiera.—¿No te ves como titular ante Colombia?—Más que ser titular o no, quiero serle útil y formar parte del grupo que logre este anhelado sueño de clasificar al Mundial.—¿Se le puede ganar en Barranquilla a Colombia?—Nuestra clasificación al Mundial no solo va a depender de ganar puntos en casa, sino también de visita. En Barranquilla hace calor, pero también le afectará a ellos. En mi caso respondo en el torneo local en ciudades con calor.ESTUDIÓ PARA CHEF—¿Eres una persona hogareña?—Sí, y bastante. Trato de pasar el tiempo junto con mi familia los momentos que puedo, estar con mi esposa y mis hijos.—¿Le entras a la cocina?—Claro. Estudié gastronomía hace dos años, justamente cuando estaba de para. Me metí en un instituto y lo fui llevando, es algo que siempre me gustó. Mi plan es poner un negocio. Mis compañeros dicen que mi esposa me obligó a ser chef (risas).—¿En la casa entonces tú preparas el almuerzo?—De vez en cuando lo hago cuando se puede, porque la que está mayormente en la cocina es mi esposa. Me salen bien las comidas, a Dios gracias nadie rechazó mis platos.—También dicen que eres buen bailarín, tal vez participes en El gran show...—Yo bailo pero no es algo espectacular, creo. Sería cuestión que me lo propongan, nunca ha pasado eso por mi cabeza en verdad.EQUIPO FRÍO—Tu juego es “caliente”, pero estás en un equipo frío como la San Martín...—(Risas) No es frío para nada. La diferencia quizás de otros equipos es que aquí el ambiente es otro, mucho más tranquilo, pero sí se vive con intensidad el fútbol.—¿No se compara para nada con el camerino de Alianza?—Claro, había jugadores que tenían un humor bravo. Se escuchaba salsa a todo volumen.