Salomón Libman: “Mi papá desde el cielo me ilumina” ENTREVISTA

Texto y fotos: Hugo Rodríguez

TRUJILLO. Salomón Libman mira fijamente el cielo de la Ciudad de la Eterna Primavera como buscando algo con la mirada y parecería que repite esa frase que dice que “el cielo es el límite”.

Y es el cielo, la gloria, lo que está buscando efectivamente César Vallejo en la Copa Sudamericana. Pasito a paso. El miércoles avanzó uno más en una de las mejores noches del “Yuyo” en su carrera.

Atajó cuatro penales y convirtió uno y su equipo ya está en cuartos de final. Hay razones para ilusionarse, pero también para pisar tierra firme.

“Es para mi papá que este año me dejó”, dice el héroe de los “poetas” con una mezcla de nostalgia y alegría. Todos esperan su palabra. 

–Salomón, ¡qué tal noche tuviste ante Bahía!

−El triunfo es de todos, estoy contento por mi trabajo y por este partido. A lo largo de la Copa se está viendo la perseverancia del grupo que nos está permitiendo avanzar hacia el objetivo. Puedo decir que fue una noche soñada.

–¿Cuán complicada fue la clasificación?

−Fue duro por todo lo que pasamos, había que remontar un resultado difícil, llegábamos al partido con la serie en contra. El partido estaba complicándose porque era poco probable remontar el marcador; había pasado el primer tiempo y estábamos ya en los 30’ de la segunda parte hasta que llegó el gol (de Quinteros) . Pero Vallejo puso todo para llegar a esta instancia.

–¿Qué sientes al ser la portada de todos los medios?

−Fue un triunfo de todos los compañeros, la defensa estuvo impecable. Cuando llegó el gol de “Patito” (Quinteros) y luego el de  Chiroque cuando faltaba muy poco para terminar el partido, y luego los penales, fue una alegría inmensa. Pero hay que continuar.

“QUEREMOS LLEGAR LEJOS”

–¿Crees que Vallejo puede repetir lo hecho por Cienciano en el 2003?

−Si se puede dar, bien por todos. Ahora estamos contentos por la clasificación, ya estamos entre los ocho mejores de la Sudamericana, pero vamos a ver cómo planteamos el próximo partido. Lo que sí puedo decir es que tenemos uno de los mejores planteles del país y queremos llegar lejos.

GRACIAS A DIOS

–¿Qué pasó por tu mente a la hora de los penales?

−Es algo muy fugaz que te pasa por la mente. Sabíamos que si ellos convertían un gol (en los 90 minutos) se acababan todas la ilusiones. Después, tuvieron varias oportunidades y nosotros también en los penales, atajé cuatro, para  eso trabajo... Gracias a Dios pude tapar los disparos.

–Y de paso anotaste un remate de los 12 pasos.

−Es curioso, el día anterior había pateado solo uno (en los entrenamientos). En el partido con Bahía disparé y cambié de lado, la coloqué y por suerte entró. 

–¿Qué se siente patear un penal en esta circunstancia?

–Tú ves que el arco se achica. No esperaba llegar a patear, pero era el último de nosotros, ya que habían expulsado a Niger (Vega). Después le adiviné el disparo a Lomba. Queda para el recuerdo.

–¿Cuál fue la motivación?

−Estaba mi familia en la tribuna, mi esposa, mi hijo Leif y mi madre que habían ido. Mi padre desde el cielo me ilumina. Así como ver al público que fue uno solo con nosotros para ellos el triunfo también. En mis dos años que tengo con Vallejo no había visto algo así, fue impresionante.

–Muchos hablan de “Yuyo” a la selección?

−Es algo que va a llegar en su momento, no me desespero. Ahora estamos haciendo historia con Vallejo, todo por la gente de Trujillo. 

–La ultima, ¿se puede decir que este fue el mejor de tus partidos?

−Tengo varios: la Libertadores del 2010 con Alianza Lima contra Estudiantes de La Plata y con Bolívar. También contra Millonarios en Bogotá con Vallejo. Pero son cosas del pasado; hay que mirar para adelante.