Algunas mascotas suelen encariñarse tanto con los muebles de una casa que no se pueden desprender de los mismos. Por esta razón, un pequeño gato se escondió dentro de un sofá que había sido vendido. Al llegar a su nueva casa, fue descubierto y su historia se volvió viral en Facebook.
Caylee Gilson nunca se imaginó que al comprar unos muebles usados para su casa se encontraría con tremenda sorpresa. El divertido hecho ocurrió en la localidad de Lewisville, Estados Unidos.
La mujer había contactado a otra para comprarle un mueble usado, la vendedora le indicó que los resortes de la parte inferior del sofá estaban expuestos, pero Caylee no le tomó mucha importancia y decidió comprarlo. “Ya me había dicho que no había forro debajo del sofá porque a su boston terrier le gustaba frotar la parte inferior del sofá”, contó a la página The Dodo en Facebook.
Al día siguiente, Caylee trabajó desde casa con normalidad. Sin embargo, en la noche, cuando preparaba la comida de su hijo, el pequeño le dijo que había un gato en su casa. Ella pensó que se trataba de uno imaginario llamado Ender Dragon.
Todo cambió cuando su perro pug de 3 meses comenzó a ladrar y fue a averiguar qué era lo que le perturbaba. Al salir de la sala se dio cuenta de que había un gato. “Trabajo desde casa y este gato nunca hizo ningún tipo de sonido durante 24 horas”, contó la mujer en el grupo de Facebook ‘My house, not my cat’, adjuntando fotos del sofá y el felino.
La madre de familia llamó a quien le había vendido el sofá, luego de descubrir cómo había llegado el gato ahí. La mujer le dijo que estuvo “buscando a su bebé por todas partes”. Tras el hecho fue a recogerlo, pero a pesar de ello la historia no dejó de asombrar a los usuarios.