Katia Palma revela que su expareja la dejó por tener sobrepeso: "Pobre infeliz, sino me querías antes..."

La ex jurado de Yo Soy, Katia Palma, a sus 42 años de edad luce con una figura envidiable y es que ha bajado varios kilos demás tras someterse a la delicada operación de la manga gástrica. Durante una entrevista para Magaly TV La firme, declaró que lo único que buscó con su cambio es sentirse bien con ella misma sin importarle la opinión de la gente. Asimismo, reveló que ella cumple con una dieta balanceada, incluyendo antojitos.

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Hasta el momento, la popular ex actriz cómica claun ya tiene 15 kilos menos y lo logró no solo en el quirófano, sino con disciplina de ejercicios y disfrutando de comidas saludalbes. Sin embargo, contó que a veces se da un antojo pero luego lo compensa de inmediato saliendo a correr todo para mantenerse bien. “No quiero buscar la aceptación del público ni de la gente, quiero sentirme bien conmigo misma. No me privo de nada, como lo que me da la gana, pero ahora sé jugar con las comidas. Y cuando la friego, me da el remordimiento de consciencia y salgo acorrer”, sostuvo.

Asimismo, reveló cómo intentaba bajar de peso sin tener éxito, pues probó de todo para lograrlo. “Si contara todo lo que me he metido. Desde pepas de ajo, pastillas de café, batidos, dietas que salgan en Internet, pero nunca me han dado resultados”, señaló.

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Katia Palma revela que padeció de bullying

La actriz cómica Katia Palma reveló que antes de adelgazar sufrió de bullying desde pequeña, pues siempre la llaman de manera mal intencionada la "gordita". Asimismo, hubo una pareja que la despreció por no encajar en los estándares de la sociedad, ahora solo se burla de él indicando que seguramente tampoco la vería bien estando con mucho menos peso. De esta manera demuestra que la vida le ha dado grandes aprendizajes y ella ha sabido sobrellevar las desaveniencias.

“Me han dejado en una relación, me han dejado por cómo me veía y, bueno, siempre estás expuesta a que la gente te diga: ‘la gordita, la gordita, la gordita’ (...) pero lo tomo como un aprendizaje. Hoy en día digo: ‘Pobre infeliz’. Si no me querías antes, ahora menos te voy a querer”,