Pasó por la prueba del polígrafo y dejó a más de uno con la boca abierta. Reveló que no está seguro si es el padre de la pequeña Gía, la hija de Angie, y le encantaría realizarse una prueba de ADN.
“Por lo menos sigo vivo y no me he muerto por tener esa duda. Estoy tranquilo. No es algo que me persiga en la cabeza”, afirmó. Luego explicó, en qué se fundamentaban sus dudas.
“Nosotros no teníamos relaciones, yo tampoco paraba mucho en casa. En esa época, ella trabajaba en otro programa. Por ahí me llegaron rumores de lo que estuvo haciendo. Y, ¡oh, coincidencia!, se embaraza”, relató.
“Ella siempre quería una hija con ojos verdes y, ¡oh!, salió con ojos verdes, coincidentemente la persona con la que estaba saliendo también tiene los ojos claros. Uhmm...”, agregó.
—¿No sería más fácil someterse a una prueba de ADN?, preguntó Beto Ortiz.— “Me encantaría. Pero conozco la respuesta ante esta situación de parte de las personas que están a cargo de la bebé: ‘No te preocupes, no hay ADN que tengas que hacerte, no es tu hija. Haz tu vida’”.NO EXTRAÑA A HIJOSAdmitió que no extraña a sus dos pequeños hijos: Janko y Gía, quienes viven en Chile con Angie. Tampoco le importa que llamen papá a la nueva pareja de la modelo.
“Para querer a una persona, tienes que sentir y compartir con esa persona. ¿Qué pasó? La ley, circunstancias económicas y muchos factores no me permitieron hacer muchas cosas por ellos. Cuando viajé a Chile intenté tener una relación de padre e hijo. Pero cada despedida con Janko, yo me sentía mal con él, pues sabía que no iba a regresar. Entoces decidí que su vida sea en base a sus juegos y a las niñeras, no esperando a que llegue su papá. Yo siento que estaba haciendo lo correcto. Prefiero no sentirme partícipe de generarle algún trauma a una persona, si yo sintiera que mi vida le daría algún sentido a ellos los buscaría”, añadió.NUNCA AMÓ a ANGIEJean Paul volvió tras reconocer que nunca estuvo enamorado de Angie. “No me enamoré de ella. Mis padres me dijeron que no me convenía. Me acerqué a ella por misericordia. Dios me habló. Son extraños los caminos del Señor. Yo veía en ella a una persona pobre en todo sentido y quería ayudarla. Cuando quedó embarazada me dije: “¡Qué fuerte era la misión!”, contó desatando la risa.
Además señaló estar arrepentido de haber estado con ella. “Fue la peor etapa, una pesadilla”.—¿También borrarías a los hijos?, preguntó Beto.—“Obvio. Por lógica”, expresó.MARIHUANA E INSULTOSContó que sí fumó marihuana junto a Angie, pero no se considera un adicto a las drogas. “Las veces que he probado me he cagado de risa”, comentó. Aceptó que días antes de la grabación de El valor de la verdad había consumido dicha sustancia. “Claro. No soy una persona drogadicta. No dependo de las drogas. Fumo cuando me provoca. Soy muy adicto al tabaco. Cuando no tengo un cigarro me angustio”, replicó.
Recordó que llamó puta a la madre de sus hijos. “No solo se lo he dicho, lo he pensado”, comentó. Además confesó que lloró por la “Chica de los tatuajes”: “Ella es aterradora”, sentenció.DESTROZOS EN TARAPOTOPor primera vez aceptó que agredió físicamente a Jibaja durante la relación y que fue el responsable de los destrozos en un hotel de Tarapoto
“Fue una reacción estúpida. Se dijeron muchas cosas de ese tema con la intención de resguardar la imagen de ella. Angie estaba consumiendo cocaína en el baño. Entonces di varios golpes al vidrio para conseguir que me abriera la puerta”, explicó, mientras su novia Romina Gachoy con el rostro resquebrajado se sorprendía de todo.
Por último, manifestó que su ex pareja, tenía momentos de autodestrucción y agarraba un cuchillo para hacerse daño. De esta manera explicó de por qué en un momento de desesperación lanzó un microondas sobre la mesa de vidrio de la casa donde vivían, durante una discusión.
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