A tres años de su trágica muerte, el estilista Marco Antonio Gallego vive en el corazón de su familia y de sus amigos, que ayer lloraron ante su tumba en el cementerio Campo Fe, en Huachipa. Acompañada de sus hijas Maricruz y Marielena Gallego, su madre María Gonzales revivió el dolor de aquel fatídico 9 de julio del 2009. “Hoy (ayer) hubiese cumplido 46 años si estuviera con nosotros. Tenemos que recordarlo siempre”, expresó su amigo Juan Salas, quien llegó con el maquillador Carlos Cacho.