El nuevo presidente de la Agremiación de Futbolistas, Roberto Silva, acusó a Francesco Manassero, su antecesor, de manejar a su antojo a esa institución, y admitió que cuando él formó parte de esa directiva, “solo era en el papel”.
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“No ha habido elecciones, yo era el vicepresidente inactivo y antes fui tesorero en papel, pues los que manejaban la Agremiación eran Francesco (Manassero) y Fernando (Revilla). Por eso me ha tocado adaptarme aceleradamente a esta responsabilidad”, dijo el ex delantero.
“Tengo mucho entusiasmo con lo que se puede hacer en favor del fútbol peruano”, agregó.
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El titular de la Agremiación también plantea una acción conciliadora con los dirigentes de los equipos: “Muchas veces se puede pensar que la Agremiación está para pelear; sin embargo, nosotros solo somos un ente controlador y buscamos apoyar la formalización del fútbol peruano”.
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