Juan Carlos Bazalar recibirá ayuda de Aldo Cavero en su lucha contra el cáncer

Nicole Vásquez CubaEra el 2001. Aldo Cavero jugaba en Melgar cuando un dolor en la pierna izquierda le hizo preocuparse. Días después supo que tenía un tumor cancerígeno.Recuerda que se deprimió y no pudo evitar ser asaltado por el miedo y la angustia. Pensó que no iba a poder realizar su vida como había pensado.En ese trajín tan duro apareció Juan Carlos Bazalar, su compadre y amigo, para darle ánimos y hacerle entender que mientras tenga fuerza debía seguir adelante. Y lo hizo.Hoy 14 años después, Cavero, aunque no hubiera querido, se encuentra con otra terrible noticia. El “Juanca” está pasando por una situación similar, pero como con él, está seguro que esta batalla también la van a ganar juntos.—Aldo, muchos no recuerdan que tú también sufriste de cáncer hace algunos años...−Sí, para ser exactos hace 14 años, y desde entonces no dejo de hacerme un chequeo anual.—¿Cómo te enteras de tu enfermedad?−Jugaba en Melgar y sentí un dolor en la pierna izquierda. Me hicieron una resonancia y me dijeron que tenía un tumor en el fémur.—¿Qué pasó entonces?−Me vine abajo, entré en depresión y no quería salir de mi casa, pero mi compadre (Juan Carlos Bazalar) llegó a buscarme y gracias a él estoy acá.AMIGOS SON LOS AMIGOS—Pocos saben que en ese entonces el primero en ayudarte fue justamente  Bazalar...−Sí. Él y su esposa llegaron a mi casa ni bien se enteraron de la noticia, ellos me ayudaron a seguir adelante.—Pero llegaste a Lima y resultó que no era un solo tumor sino dos...−Exacto. Mis compadres me hicieron entender que tenía que ir al Neoplásicas y hasta me acompañaron en cada cita, hasta que me atendieron. Cuando me hicieron los análisis resultó que tenía un tumor más en el testículo izquierdo. Para mí eso fue devastador.—Quién mejor que tú para darle ánimos a “Juanca” entonces en estos momentos...−Hace 14 años tocó que él me trajera y yo esperaba no devolverle nunca ese favor, pero acá estoy, porque gracias a él pude encontrar fuerzas para seguir. Sé que en 14 años más nos acordaremos de esto como una de las tantas anécdotas que tenemos.—¿Cómo te enteraste de la noticia?−“Ceci” (Cecilia Aróstegui, esposa de Bazalar) me llamó cuando le dieron los resultados, nerviosa e impactada y era totalmente comprensible, no sabía cómo darle la noticia a Juan Carlos.—¿Tú le diste la noticia?−No, pero estuve en el momento en que mi comadre se lo dijo.—¿Cuál fue la reacción de él?−Para nadie es fácil. Imáginate. Lloró y lo abracé como lo hizo conmigo cuando yo lloré con él.NO SE OLVIDEN DE ÉL—¿Qué hablaron?−Le dije lo mismo que él me dijo hace 14 años: “Llora todo lo que quieras hoy, porque desde mañana tienes que estar más fuerte que nunca para sacarnos esta mie... de encima”, y así lo está haciendo.—¿Qué necesita ahora Juan Carlos?−Mucha ayuda, porque después de la operación no termina el tema. Se vienen gastos importantes que va a tener que asumir la familia y esperamos que los hinchas que lo quieren también lo puedan apoyar. Ojalá no se olviden de él, pero él va a luchar.