Wilfredo Oscorima se salva de ser linchado durante protesta y escapa en helicóptero

El gobernador de Ayacucho, Wilfredo Oscorima, enfrentó una situación extremadamente peligrosa en Huanta, donde una manifestación antiminera se tornó violenta. Oscorima, quien había acudido a la provincia para dialogar con los manifestantes en el cuarto día de paro indefinido, tuvo que ser rescatado por la Policía Nacional del Perú (PNP) tras ser rodeado y agredido por la multitud enfurecida.

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Oscorima fue a negociar pero casi termina linchado en paro

La protesta, que se lleva a cabo por la comunidad local, exige el cierre de las empresas mineras que, según los manifestantes, están contaminando las aguas de la cuenca del Razuhuillca. Además, solicitan que la zona sea declarada como intangible. La tensión aumentó a medida que las demandas de los manifestantes no recibían respuestas satisfactorias por parte de las autoridades.

Oscorima se dirigió al estadio local con la intención de negociar una solución a las demandas de los protestantes. Sin embargo, la reunión se tornó caótica cuando los manifestantes rodearon al gobernador, lanzando botellas, palos, piedras y profiriendo insultos. La situación rápidamente se deterioró, obligando a los efectivos de la PNP a intervenir para proteger a Oscorima.

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Oscorima huyó en helicóptero

Para evitar un desenlace trágico, la policía utilizó bombas lacrimógenas para dispersar a la multitud y asegurar una salida segura para Oscorima. A pesar de los esfuerzos del contingente policial, la situación se agravó, llevando a la necesidad de usar escudos antidisturbios para escoltar al gobernador hacia una zona segura.

Finalmente, Oscorima fue evacuado en un helicóptero del Ejército, mientras la multitud continuaba persiguiéndolo y lanzando piedras. La rápida intervención de las autoridades fue crucial para evitar un posible linchamiento y garantizar la seguridad del gobernador.