¿Por qué el Perú es un país sísmico y que nos aguarda en un futuro cercano? El IGP lo explica

El presidente ejecutivo del Instituto Geofísico del Perú (IGP), Hernando Tavera, contó los motivos por el que nuestro país tiembla mucho cada cierto tiempo de manera fuerte o leve, pero que de igual modo asusta y mantiene en alerta a toda la población, que además siempre practica algún tipo de simulacro para saber como actuar ante estos fenómenos naturales.

El IGP indicó que los sismos en América del Sur y en el Perú ocurren debido al proceso de choque frontal de las placas de Nasca y Sudamérica que se desplazan a velocidad del orden de 7 centímetros por año. Además, señaló que al ser la placa de Nasca más débil, se introduce por debajo del continente dando lugar a una superficie de contacto y desarrollando fricciones y la consecuente acumulación de esfuerzo y deformación que se libera en forma de ondas cuando ocurre un sismo.

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Es inevitable tener temblores

“Este movimiento de las placas es continuo en el tiempo y, por lo tanto, siempre van a ocurrir sismos, con mayor continuidad los de menor magnitud y los de mayor magnitud con periodos de tiempo largo”, manifestó.

El producto de la colisión de placas, el borde costero de América del Sur, hizo que se levantara y se formara la Cordillera de los Andes, generando importante deformación en su superficie que al final, dieron origen a fisuras de variadas longitudes llamadas fallas tectónicas, que también generan sismos, pero de menor magnitud y frecuencia.

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“Finalmente, la placa oceánica o de Nasca al introducirse por debajo del continente alcanza la profundidad de 120 kilómetros, a partir de la cual continúa su desplazamiento de manera casi horizontal hasta llegar por debajo de las ciudades Yurimaguas y Pucallpa, por ejemplo”, argumentó.

¿Qué pasará en un futuro cercano?

El IGP resaltó que la información histórica para los últimos 500 años detalla con precisión la ocurrencia frecuente de sismos de elevadas magnitudes que han afectado en gran porcentaje a la ciudad y población. Tal es el caso del sismo ocurrido en la costa central en el año 1746, en la región sur en el año 1868, y en la región norte de Chile en el año 1877, quizás con magnitudes que sobrepasaron el valor de M8.5.

Debido a un silencio sísmico que se vive en Lima, se espera que en un futuro suceda un terremoto de más de 8 grados de magnitud, este superaría en intensidad al terremoto ocurrido en Ica en el 2007 y dejaría miles de muertos, damnificados, desaparecidos y viviendas destruidas y podría venir seguido de un tsunami.