Tras un paciente trabajo de vigilancia, el personal de la Dirección de Inteligencia-DIRIN detuvo a miembros de un clan familiar "Los Caceros de Ate" que se dedicaría a la explotación laboral y trata de personas en Ate-Vitarte.
En coordinación con agentes de la División de Secuestros de la Dirincri, lograron capturar a Margarita Guisela Soller Cahuana (42), alias ‘Cucaracha’, cuando se hallaba entre las avenidas Prolongación Javier Prado y Metropolitana.
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Los agentes la habían visto cobrando cupos a meretrices que ofrecían servicios sexuales a parroquianos en inmediaciones del Mercado Las Brisas en Ate. De manera simultánea, los agentes policiales detuvieron a Lourdes Esteban Borja (42) ‘Lourdes’, quien estaba dentro del bar-cebichería Mera Mera, ubicado en la Mz A Lt 6-A en el mismo distrito.
Se encontraron a menores
Dentro del bar que fue intervenido y que funcionaría como fachada, se encontró a una menor de 17 años de edad que estaba bebiendo alcohol junto a unos parroquianos. Asimismo, la policía detuvo a Himelda Mercados Chamorro (a) ‘Himelda’, quien según información policial realizaba el cobro de cupos a las prostitutas que se encontraban cerca del bar Mera Mera.
Dentro del local se intervino a las meretrices como a trabajadores que serían de nacionalidad venezolana y llevados a la dependencia policial.
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Cabe señalar que en el tercer piso del local, se encontró a tres menores de edad de 11, 8 y 6 años de edad. Los niños fueron puestos a diposición del Inabif ya que se encontraban en situación de peligro.
Hallaron arma
Los efectivos policiales fueron con Soller Cahuana hasta su vivienda en la Asociación Los Ángeles en Ate, donde encontraron a un hombre. Este fue identificado como Víctor Antonio Esteban Borja (45) ‘Toño’, quien se encontraba oculto en una de las habitaciones de la vivienda.
Entre sus pertenencias se le encontró un arma de fuego con número de serie FD-36543, que le pertenece a un efectivo policial, la cual esta reportada como robada. Los agente procedieron al allanamiento de la vivienda del inmueble, donde se pudo incautar diversos celulares, equipos de cómputo, memorias USB y cuadernos, llevados todos ellos a la sede de la Dirincri para las investigaciones.
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