Tras cuatro meses de investigación, la policía detuvo a Harry Gutiérrez Bautista (35) “Harry”, sindicado por la fiscalía como uno de los tres sicarios que perpetraron el crimen del suboficial superior Rusber Lázaro Arquinigo (45) y de una pareja de informantes con quienes el agente se reunía en un bar del distrito de Vista Alegre, en la provincia de Nasca, como parte de labores de inteligencia.
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Pesquisas realizadas por agentes de la División de Homicidios permitieron establecer la participación de Gutiérrez Bautista, así como de Jorge Guerra Mendiola (30) y Carlos Dávalos Almeyda (26), en el triple crimen.
Al momento de su detención, a Harry se le incautó una pistola Glock abastecida con 10 municiones, una pistola Sigsaur con 15 cartuchos y 18 paquetes de dinamita.
El hecho que más llamó la atención para la PNP fue la incautación de 14 celulares, 41 USB y más de 4.700 soles en efectivo. Esto podría permitir seguir el rastro a esta organización criminal.
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