Un aparente enfrentamiento entre policías y dos integrantes de una banda de asaltantes de taxis desató el pavor en una vivienda en la que estaban reunidas al menos 50 personas, entre hombres, mujeres y niños, tras participar en la misa del año de un pariente en el Callao.
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A consecuencia del feroz enfrentamiento, resultó herida de bala una niña de once años, nieta de un ex policía. Igualmente, una vecina y un presunto delincuente.
El incidente ocurrió a las 10 de la noche del sábado, cuando las personas estaban en el interior y exterior de una vivienda del Jr. Tarapacá, entre las cuadras 6 y 7 de la Av. Constitución.
De pronto, la presencia de cuatro policías de la Depincri del Callao, vestidos de civil y con chalecos, alertó a todos. Ellos perseguían a balazos a dos ladrones.
Ante los disparos y en medio del desconcierto, todos trataron de ponerse a buen recaudo. Algunos se arrojaron al piso y otros pretendieron ingresar a la casa por la angosta puerta.
Un proyectil impactó en el hombro de la menor A.F.L.C. (11), que acabó con el omóplato fracturado. Su vecina Lucía Morán y uno de los sujetos que eran perseguidos, identificado como Bryam Paul Bravo Gamboa (23), también resultaron heridos de bala. Todos fueron trasladados al hospital Daniel Alcides Carrión.
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Testigos y parientes obligaron a que los cuatro agentes del orden trasladen al hospital a la niña, en el mismo carro en que llegaron.
La madre de la pequeña, Sheyla Cámara Malincovich, contó que los presentes vivieron casi cinco minutos de terror. “Los policías dispararon a matar. No tuvieron en cuenta la presencia de los niños. Pudo ser peor. Yo me escondí debajo del carro y mi hijita corrió a la casa ensangrentada”, sollozó.
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