
Un genial doodle lanzó este jueves Google para celebrar los 245 años del nacimiento compositor alemán Ludwig Van Beethoven, el autor de la Quinta y la Novena Sinfonía.
El garabato interactivo muestra a Beethoven tratando de ordenar sus partituras y los usuarios acudirán en su ayuda para ordenar correctamente las diferentes partes de la bagatela “Para Elisa”, el inicio de la sonata “Claro de Luna” el primer movimiento de la “Quinta Sinfonía” y el cuarto movimiento de la “Novena Sinfonía”. Todas estas obras son consideradas las más famosas del genio de Bonn, que terminó sordo.
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PARA ELISA
La bagatela “Para Elisa” es probablemente la melodía más conocida entre las obras para piano escritas. Fue publicada en 1867, muchos años después de la muerte del artista, lo cual ha generado polémica.
“QUASI” UNA FANTASÍA
La sonata “Claro de Luna” es otra composición famosa de Beethoven. Esta obra en la número 14 de sus sonatas para este instrumento y también lleva el sobrenombre de “Quasi una fantasía”. El editor musical Giovanni Cappi publicó la partitura de la sonata en 1802, con la siguiente inscripción: «Sonata casi una fantasía para clavecín o piano, compuesta y dedicada a la señorita condesa Giulietta Guicciardi, de Ludwig van Beethoven. Op. 27, n.º 2. Publicado en Viena en casa de Giovanni Cappi, Michaelerplatz N º 5.» La sonata tiene tres partes, pero la que goza mayor reconocimiento, desde la primera nota, es el primer movimiento, adagio sostenuto.
EL DESTINO TOCA LA PUERTA
El doodle de Google también permite completar los primeros compases de la “Quinta Sinfonía”.
Tras la publicación de la “Tercera Sinfonía”, considerada por los expertos como una verdadera innovación en este tipo de composiciones para orquestas sinfónicas, la “Quinta” sin duda es una de las obras más populares de la historia de la música clásica. Su tema principal, lleno de dureza y drama, puede ser reconocido de inmediato en cualquier parte del mundo.
La sinfonía del “Destino”, como también suele llamarle, fue dedica a sus amigos y mecenas el príncipe Joseph Franz von Lobkowitz y el conde Andrey Razumovsky.
TODOS SOMOS HERMANOS
La última sinfonía, la “Novena” o llamada “Coral”, es una verdadera joya que causó revolución en el género musical de aquella época, y hoy por hoy es un patrimonio de la humanidad.
El cuarto movimiento, en el que interviene un cuarteto de cantantes y un coro mixto, se caracteriza por el “Himno a la alegría”, es una musicalización del poema An die Freude (noviembre 1785), traducido como "A la alegría", cuyo autor es el poeta Friedrich Schiller.
La “Novena Sinfonía” empezó a ser escrita en 1821 y fue concluida en 1823 junto a la obertura “La consagración de la casa” y otra de sus composiciones monumentales: la “Missa Solemnis”.
En el día de su estreno, el 7 de mayo de 1824, Beethoven no podía oír a la orquesta pero siguió la ejecución de su obra leyendo la partitura.
Cuando terminó por ejecutarse la sinfonía, el público aplaudió al unísono, pero el compositor alemán estaba enfrascado aún en genialidad.
Uno de los músicos atinó en tocarle el brazo a fin de que pudiera voltear y recibir los elogios de la audiencia. Esta sería su última aparición pública.
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