
Antonio García G.Cuando la humilde recicladora María Girón contestó el teléfono enmudeció y sintió que el mundo se le venía encima.Desde Caracas, la voz de una mujer le comunicaba que su hija, María Isabel Terrazas Girón, había sido asesinada.“Fue la hermana de mi yerno, Rosmery, quien me dijo que mi hija estaba muerta, que la policía había detenido a su hermano”, dijo la mujer llorando. Según precisó, Wilmer Romero Álvaro, con quien tenía dos hijos, acabó con su vida tras atacarla con un destornillador y un cuchillo.El criminal habría actuado en completo estado de ebriedad. “Me contaron que estuvo tomando desde el Día del Trabajo”, manifestó María Girón.Todo habría ocurrido delante de sus hijos de 5 y 14 años, luego de una discusión cuando la mujer se negó a darle dinero para que siga bebiendo.Tras detener a Romero Álvaro, la policía de ese país halló el destornillador con restos de sangre y el cuchillo, usados en el crimen. La víctima tenía en Cúcuta un taller donde confeccionaba prendas de vestir que vendía en tiendas de Caracas.
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