El antropólogo forense Roberto Parra se ratificó ante la fiscal corporativa de Arequipa, Rosario Lozada, en su versión de que el joven Ciro Castillo Rojo sufrió un desbarrancamiento o derrapamiento abrupto en el Bomboya generado por un agente externo.
Parra reiteró las conclusiones de su dictamen pericial físico dado en febrero del 2011, en el que establece que el universitario se desbarrancó unos cuatro metros.
El perito descartó la posibilidad de una caída libre y precisó que las lesiones que presenta el cráneo del universitario son por un violento impacto en la cabeza.
En esa línea, explicó que el derrapamiento se dio por una fuerza de aceleración sumada a una fuerza de gravedad y una fuerza de desaceleración abrupta con el golpe, que determinó la reacción conocida como“latigazo”.
En la audiencia, el abogado de Ponce, Miguel Cabrera, le preguntó al antropólogo si Rosario pudo haberlo empujado. El antropólogo respondió que él no estuvo en el lugar. El letrado insistió, pero la fiscal hizo que desistiera.
Cabe indicar que para Lozada Sotomayor no se debilita su acusación contra Rosario. Por el contrario, indicó que se reafirma su hipótesis de que esta empujó a su ex enamorado y le provocó la muerte. (R. Aronés)
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