“Dónde está tu valentía Tito, ¿por qué me dejas, quién va ver por mí y tus hijos?”, preguntaba Cristina Quino desesperada y llorosa al ver a su esposo Tito Escalante Aguilar muerto. “Nada será igual, eres un hombre bueno y generoso, levántate por favor”, repetía la afligida mujer.