Tras un fallido trasplante realizado a D’Zhana Simmons fue necesario quitarle el corazón para reemplazarlo por un nuevo órgano y que sí logró reestablecer su función cardiaca.
Mientras, durante cuatro meses, la joven tuvo que ser conectada a un sistema de bombeo para continuar su vida y la circulación de sangre en su cuerpo.
"Podríamos asegurar que nunca una persona tan joven había vivido tanto tiempo sin corazón por un período tan largo" dijo Marco Ricci, director de Cirugía Cardíaca Pediátrica y uno de los doctores que operó a Simmons.
Ricci contó que los primeros dos meses que estuvo sin corazón la condición de la paciente era compleja pues tenía infección en un pulmón, insuficiencia de respiración, del riñón y del hígado.
D’Zhana dejó el hospital el miércoles y se alojó en un hotel cercano para ir a controlarse durante dos o tres meses.
Revisa todas las noticias escritas por el staff de redactores de El Popular.