Desde Tocache a La Molina: el chef Carluis Cuyutupa conquista Lima con sabor amazónico

Carluis Cuyutupa nació en Tocache, región San Martín, en medio de una realidad marcada por la pobreza y la falta de oportunidades. Desde niño ayudaba a su madre a vender comida en las calles para sostener a la familia. Aunque estuvo rodeado de caminos peligrosos, logró mantenerse firme gracias al respaldo de su madre y sus familiares, quienes lo enviaron a Lima con la esperanza de que tuviera un futuro mejor.

PUEDES VER: Promueven el consumo del café peruano gracias a innovador artefacto

En la capital, Carluis intentó primero abrirse camino en la mecánica, pero su verdadera pasión siempre estuvo en la cocina. Fue así que, a los 30 años, junto a su esposa, decidió apostar por sus raíces y abrir su primer restaurante: Shicshirabo de Tocache, en Santa Anita. El local nació como un homenaje a los sabores de la Amazonía, con platos como el juane, el inchicapi, el tacacho con cecina y la palometa frita.

El sueño amazónico llega a La Molina

El éxito del primer local fue inmediato. Su propuesta auténtica y el orgullo por sus raíces lo posicionaron como uno de los principales referentes de la gastronomía amazónica en Lima. Con ese impulso, Carluis abrirá su segundo restaurante: Shicshirabo Tocachino, que estará ubicado en el cruce de Separadora Industrial con Los Frutales, en el distrito de La Molina. La apertura será el 2 de mayo de 2025.

Este nuevo espacio ofrecerá una experiencia diferente. No solo incluirá su reconocida carta de platos tradicionales y fusiones como el cebichito amazónico y el caldo de gallina regional, sino que también tendrá una pista de baile para que los comensales disfruten al estilo de la selva. “Queremos que la gente coma rico, pero también se divierta. Queremos llevar la Amazonía a todos los sentidos”, afirma el chef.

El evento inaugural contará con la presencia de la artista cubana Lisandra Lizama, quien será la madrina del restaurante. “Tenerla como invitada especial es un honor. Su arte y energía representan el espíritu de este nuevo espacio: alegría, sabor y conexión con la cultura”, expresó Carluis con entusiasmo. El objetivo, dice, es llegar a más personas con una propuesta accesible y llena de identidad.

Más allá del emprendimiento, Carluis tiene un mensaje claro: “Sí se puede hacer patria desde nuestra tierra. Solo se necesita coraje, fe y nunca dejar de soñar”. Su historia no solo inspira a quienes vienen de regiones olvidadas, sino también a todos los que creen en el poder de transformar la vida con esfuerzo, identidad y amor por lo que uno hace.