Víctima de trata de personas en Lince da entrevista en exclusiva: "Tuve amigas que han sido quemadas"

"Tuve amigas que han sido quemadas". Su voz se corta, se agarra las manos y mira al suelo como si un recuerdo la golpeara de frente. Una de las víctimas de la trata de personas en Lince accedió a darnos una entrevista y contarnos el oscuro mundo de la mafia del proxenetismo. 

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Entrevista a víctima de trata de personas

Fui citado a un lugar que dejaremos en reserva. Era un cuarto pequeño, casi sin objetos, pero el ambiente se sentía cargado. Ella estaba sentada en un sofá, visiblemente nerviosa; sabía muy bien que, si se enteraban de que había declarado, era posible que al día siguiente no estuviera viva.

"Tengo 24 años. Soy de nacionalidad venezolana y llegué al Perú aproximadamente hace 6 años", dijo con voz baja, como si tuviera miedo de que la escuchen. "Vine recomendada por una amiga que trabajaba en esto también. Al llegar al Perú tuve que pagar una suma de 15 mil soles". 

Ana, que ahora llamaremos así por seguridad, fue traída al Perú con engaños. Le dijeron que iba a ganar mucha plata en Lima; sin embargo, al llegar a la capital, cayó en las manos del Tren de Aragua. La obligaron a prostituirse en la zona de Mega Plaza y Plaza Norte. Luego fue trasladada a Lince. Una vez en las calles de Risso, Ana tuvo que ver cómo sus compañeras eran asesinadas si no pagaban el cupo de 500 soles semanales.

"Les revientan la cabeza con cascos; es horrible. Les disparan, y he visto cómo dejan las balas en las piernas y ahí se tienen que quedar”, hace una pausa en sus declaraciones; parece que ese mal recuerdo la vuelve a atormentar. "Las desaparecen, las descuartizan. Tengo amigas a las que no he vuelto a ver nunca más", y su voz se corta. Tenemos que parar la entrevista un momento para que se reponga.

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Fosas comunes

Según la presidenta del Movimiento de Trabajadoras Sexuales, Ángela Villón, existen fosas comunes que usan las bandas criminales para dejar los cuerpos de las trabajadoras sexuales asesinadas.  En otros casos, las queman y abandonan sus cuerpos en las carreteras. Solo en 2024 se han reportado más de 20 asesinatos de mujeres en condición de trata de personas. Muchos de los crímenes son difundidos por los delincuentes como amedrentamiento. 

"¿Alguna vez has tenido la oportunidad de escapar de estos criminales?", le pregunto. Ella se queda en silencio por unos segundos y responde: "He tenido la oportunidad, pero no lo pienso hacer por miedo, porque si lo hago, me buscarán, me descuartizarán o me quemarán, o simplemente me harán desaparecer".

De acuerdo con Ana, la plaza de Lince es dominada por una banda criminal llamada “One Family”, cuyo líder es el peruano Danny Alexander Zapata Sosa, alias "el Chino". Dicha información también fue corroborada por el coronel Jan Bergerot Castro, jefe de la División de Trata de Personas, quien nos mencionó que dicho delincuente es el principal responsable de los asesinatos en la zona. 

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"Él (alias "el Chino") manda a sus perros para que nos cobren. Las que no pagan, las golpean o simplemente se las llevan", dice Ana, y su mirada se desvía hacia el suelo. Le acerco un vaso de agua, ya que su voz se queda por momentos atrapada en la garganta. 

"¿Qué piensas hacer ahora?". Ella se queda sin palabras después de responder las preguntas más difíciles. Me mira, y una lágrima se desliza por su mejilla. Ana es actualmente ayudada por organizaciones contra la trata de personas. Si bien aún no ha salido de las garras del crimen organizado, espera que las autoridades capturen a los principales proxenetas y no criminalicen el trabajo sexual.