Policía capturó a un abogado acusado de integrar una mafia de traficantes de terrenos

El prófugo y escurridizo abogado Carlos Condorcahuana Roca, que se convirtió en el brazo legal de las mafias de traficantes de terrenos en Lima y el Callao, fue detenido por la Policía Nacional del Perú, en el centro de Huaral cumpliendo la orden de captura expedida por el Poder Judicial para que cumpla una sentencia de 4 años y ocho meses por el delito de usurpación agravada.

Según información confirmada por el Instituto Nacional Penitenciario (INPE), Condorcahuana fue recluido en el Establecimiento Penitenciario Callao “Sarita Colonia” el último 11 de julio.

De acuerdo a las investigaciones, el 30 de agosto del 2012, Condorcahuana acompañado de Santiago Vega Obregón, supuesto posesionario de un lote en el Fundo Oquendo, ocupó por la fuerza un área de 40 mil metros cuadrados de terrenos agrícolas.

Premunidos de cargadores frontales demolieron una casa de adobe aplastando a más de 100 gallos de pelea, arrancaron árboles de raíz, y arrasaron la siembra, con la finalidad de ponerlos a disposición de Inmobiliaria Constructora J.R. de Edita Lopez Silva de la que Condorcahuana también era abogado y con la que suscribieron un contrato de compra venta del terrenos usando un falso titulo de propiedad.

A raíz de esta usurpación Inspectoría de la PNP procesó a los efectivos de la Dirincri Callao que al mando del comandante PNP José Santillán Pérez, realizaron un operativo en el que, en vez de detener a los usurpadores, terminaron apresando a los vigilantes de los terrenos. La institución policial en un proceso disciplinario cesó a ocho policías luego de una investigación concluida en el 2014.

Recientemente los agraviados, el agricultor Víctor Takayosi Takayosi y el empresario Víctor Huarancca Medina han demandado la restitución o devolución de los terrenos que, al momento de ser usurpados, eran de uso agrícola y hoy están lotizados y construidos.

Condorcahuana es un abogado que anteriormente ha recibido sentencias condenatorias por fraude procesal, otra por lesiones y dos condenas más por usurpación, por su vínculo a organizaciones dedicadas a esta ilícita actividad como el extinto Jacinto Aucayari Bellido (a) “Cholo Jacinto” y otras organizaciones dedicadas a tráfico de terrenos.