Virgilio Martínez fue golpeado por las deudas, casi quiebra, pero ahora es el dueño del mejor restaurante del mundo

Virgilio Martínez Véliz, dueño de Central, estuvo a punto de tirar la toalla, dejar su empresa y dedicarse a otro rubro, pero decidió luchar y ahora su restaurante es el mejor del mundo. En esta nota te contaremos su historia de éxito.

Recientemente el restaurante Central ha sido elegido como el mejor lugar gastronómico en el planeta, según la prestigiosa lista de “The World’s 50 Best Restaurants que elogió al restaurante peruano y lo calificó como “una oda a la comida”.

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Pero antes de ser el mejor del mundo, Virgilio estuvo ahorcado por las deudas, la crisis económica caudada por la pandemia y los avatares que surgieron en su comino. “Fuimos de la lista de los restaurantes que estábamos destinados a desaparecer”, dijo el chef, sin embargo, sus ganas de luchar fueron más fuertes.

A punto de cerrar

“Teníamos 145 empleados. Habíamos cambiado de espacio en el 2018 y la pandemia nos agarró con fuerza”, mencionó en su momento. Intentaron hacer delivery, pero no fue rentable comenzaron a perder dinero y la idea del cierre estaba más cerca.

Sin embargo, comenzaron a seguir trabajando y ganando premios internaciones lo cual generó la curiosidad entre los peruanos y los turistas. Posteriormente siguieron seleccionando lo mejor de sus ingredientes y vendieron experiencia en casa plato.

“Ha habido un mejoramiento de todas las semillas y los vegetales que siempre habíamos soñado; ahora los tenemos porque en ese momento se hizo un trabajo espectacular en granja”, aseveró el chef.

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El mejor del mundo

Finalmente se convirtieron en el mejor del mundo. Las primeras palabras del chef fue el agradecimiento de todo su equipo. “Muchas gracias para todos los que están acá, a todas las personas que nos apoyan, a la gente que está lejos, a mis colegas y mentores”, indicó.

“Queremos dar consistencia y credibilidad a esta industria. ¡Por Sudamérica y por Perú!”, mencionó Virgilio Martínez.

 “Esto no es acerca de ser el número 1, no es acerca de la competición, no es acerca de ser el mejor. Es sobre lo que hacemos todos los días: amar lo que hacemos y lograr nuestros objetivos. Muchas gracias”, dijo.