Alejandro Toledo y la vez que fingió un secuestro para vivir una noche de drogas, sexo y alcohol

A pocos días para ver al expresidente Alejandro Toledo, nuevamente, en el país, ya que su proceso de extradición empezó este viernes con su entrega, aún se recuerda el día en que el exmandatario fingió un secuestro para vivir una noche de drogas, sexo y alcohol en el hotel Melody. El exmandatario compuso una farsa para ocultar su orgía con cinco damas de compañía.

La historia empezó el 16 de octubre de 1998 cuando Toledo Manrique aún no era líder de las movilizaciones sociales que perseguían el derrocamiento del exdictador Alberto Fujimori. Asimismo, el escándalo estalló cuando Toledo era candidato a las elecciones presidenciales y su adversario era Alan García.

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Dicho día, Alejandro Toledo salió de su domicilio a las 8 de la mañana y su esposa Eliane Karp lo despidió como de costumbre sin pensar que su esposo se desaparecería por 48 horas. Los excesivos gastos en la tarjeta de crédito de su marido le hizo imaginar que su cónyuge fue sido víctima de un secuestro e hizo la denuncia.

Fueron al menos S/ 15 mil soles que el expresidente se gastó en perfumes, lencería y preservativos en la hoy extinta farmacia Deza, ubicada en la cuadra 11 de la Av. Conquistadores, en San Isidro. Posteriormente a este lugar, el exmandatario se enrumbó hacia el hotel Melody.

Alejandro Toledo era un antiguo cliente

Las investigaciones del presunto secuestro de Alejandro Toledo estuvieron a cargo de los detectives Salomón Mita y Alfonso Misha, quienes llegaron al fondo del asunto. Ellos aseguraron que la desaparición de Toledo no tenía relación alguna con los secuestros que ellos habían resuelto. Manifestaron que Toledo Manrique nunca lloró cuando lo hallaron, sino que tenía una cara de haber pasado malas noches celebrando.

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“Una persona que es secuestrada, inmediatamente, cuando es liberada entra en llanto y nervios de verse nuevamente con su familia. Lo que no sucedió en el caso del señor Toledo”, expresó el comandante (r) Alfonso Misha, exoficial PNP.

“La señora dijo que el señor es conocido, siempre hace lo mismo, y que los empleados iban con las señoritas hacia el hotel donde el señor Toledo firmó los voucher y donde al preguntársele a uno de los empleados si el señor estaba coaccionado para que firme los documentos él dijo que no que el señor estaba desnudo con tres chicas ahí”, agregó.