INSN Breña: niña no volverá a tener crisis de epilepsia gracias a exitosa operación

Amy una menor de ocho meses de edad, proveniente de San Juan de Lurigancho, que sufría largas convulsiones haciendo peligrar su vida, no volverá a sufrir más este problema de salud, gracias a la operación que desarrolló con éxito un equipo multidisciplinario de especialistas del Instituto Nacional de Salud del Niño (INSN) de Breña. Ahora está recuperada y pronto regresará a casa.

A los dos meses de nacida, la bebé soportó un primer episodio de epilepsia y fue diagnosticada con el raro Síndrome de Sturge-Weber, que afecta a uno de cada 50 mil recién nacidos y se caracteriza por una malformación vascular conocida como "mancha en vino de Oporto".

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Las crisis de epilépticas eran constantes y podían durar hasta 40 minutos, presentaba además debilidad muscular progresiva en el lado opuesto de la malformación. A pesar de recibir tratamiento con tres medicamentos diferentes, su futuro era incierto. Luego de un análisis exhaustivo del caso, los especialistas del INSN concluyeron que una intervención quirúrgica era necesaria y urgente para mejorar su calidad de vida. Se le realizó una Hemisferectomía Funcional, cirugía donde desconectaron las zonas dañadas que provocaban las crisis epilépticas.

El Dr. Jaime Tasayco Muñoz, director general del INSN, destacó el accionar de los cirujanos pediatras del INSN que cuentan con capacitación nacional e internacional para resolver patologías complejas, “de esta forma logran que nuestros niños y sus familias vuelva a ser felices”, indicó el galeno.

El jefe del servicio de Neuropediatría, Dr. Johnny Montiel, indicó que, gracias a la cirugía realizada de manera temprana, la evolución ha sido favorable y no necesitará más medicamentos. Además, podrá desarrollarse con normalidad, lo que reducirá el riesgo de discapacidad intelectual, trastornos cognitivos y conductuales en el futuro.

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Por su parte, Dr. Hernán Cañari, jefe del servicio de Neurocirugía, manifestó que, la menor ha evolucionado favorablemente, se encuentra estable y no ha sufrido más convulsiones. "Ésta fue una operación de alta complejidad realizada en una bebé muy pequeña con un síndrome raro, pero logramos tener éxito". A pesar de su corta edad, Amy se recuperó completamente después de tres semanas y ahora regresará a casa.

Janet Trelles madre de la menor agradeció al INSN por haber salvado a su hija. "Siento que mi bebé ha vuelto a nacer. Antes me asustaba cuando convulsionaba, ahora ríe y levanta la cabecita", dijo la emocionada madre. La historia de Amy es un ejemplo de la importancia de detectar y tratar de manera oportuna las enfermedades neurológicas en los primeros meses de vida.