"Le han roto el brazo": madre pide justicia para su hijo militar atacado en cuartel por suboficial del Ejército
Aseguran que prima del suboficial del Ejército que habría agredido al joven de 18 años le pidió que cambiara su versión y no se dejara llevar al hospital para que no arruine la carrera de su pariente.
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Una madre de familia se encuentra angustiada e indignada por el trato que recibió su hijo Carlos Gómez Gutiérrez, un joven de tan solo 18 años, que soñaba con enlistarse al Ejército al cumplir la mayoría de edad. Este muchacho fue brutalmente agredido en el cuartél "General Div Rafael Hoyos Rubio", en el Rímac.
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Según cuenta la madre, acusó al suboficial Marcos Sernaqué Pérez quien con sus tradicionales ‘castigos’ pateó y propinó golpizas al joven hasta fracturar su brazo y parte de su hombro izquierdo y por si no fuera poco esa tortura, lo dejaron cerca de cinco días con el dolor de su brazo roto y bajo ninguna asistencia médica.
"Le han frustrado sus sueños, le han hecho padecer todo este dolor que tiene mi hijo. Le han roto el brazo, si al menos lo hubieran auxiliado, ¿Por qué dejaron que esté con ese dolor durante 5 días?, es un ser humano, soy su mamá y a mi me duele", dijo la madre.
"El lloraba de dolor y el me cuenta y me dice que lo han pateado, me han tenido así una semana", añadió la madre.
Habla el agraviado
El joven de tan solo 18 años contó todos los momentos de terror que vivió ese fatídico día donde fue salvajemente agredido. "El suboficial nos hizo poner chinches, esa es la posición donde tu pones tu cabeza en el suelo y tus manos, brazos en la espalda", contó Carlos Gómez.
A la salvaje agresión se le sumaría la indiferencia de los superiores, quienes según cuenta la madre, se habrían negado a llevarlo a un hospital para que sea atendido y por ello, el joven tuvo que vivir 5 días con el brazo roto y con un dolor insoportable dentro de este cuartel en el Rímac.
"Yo me levanto y veo como mi hombro se me cae, no podía ni levantarlo y ahí me dicen que no me preocupe que solo era un dolor muscular, que se me iba a pasar a los 2, e o 5 días", añadió el joven.
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Lo más indignante de este caso es que a Carlos Gómez Gutiérrez lo obligaron a firmar el 17 de enero, una declaración jurada asegurando que en ningún momento fue víctima de abuso de autoridad por parte del oficial de guardia ni por otros superiores y para garantizar su silencio, recibió unos mensajes por WhatsApp de alguien que decía ser la prima del suboficial Marcos Sernaqué Pérez.
"Me dijo que la apoye, que cambie mi versión, quería que cambie mi versión de como fueron los hechos", dijo el joven sobre el mensaje que recibió de la presunta familiar de Sernaqué.
Operación
La madre de Carlos dijo que su hijo necesita una operación de emergencia. "Necesita una operación cuanto antes, pero necesita una placa especial, la cual no se puede conseguir así nada más y está muy cara", añadió la madre.
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