Callao: una pareja es condenada a 16 años de cárcel por extorsionar a un joven

La peruana Zuly Celeste Cabanillas Vilca y el ciudadano extranjero Cristhiam Josue Camacho Soto fueron condenados a 16 años de cárcel por extorsionar a Diego Hernán Chocca Juro, el 29 de diciembre del 2021. Esta condena se logró por el Ministerio Público del Callao.

El Cuarto Despacho de la Séptima Fiscalía Provincial Penal Corporativa del Callao, probó ante el Poder Judicial, que los imputados son coautores del delito contra el patrimonio, en su modalidad de extorsión en agravio de Diego Hernán Chocca Juro.

Durante el juicio oral, la fiscal provincial Olga Shirley Ochoa Casas sostuvo que el día de los hechos, la víctima y Zuly Cabanillas estaban en la habitación N.°307 de un hostal ubicado en el cruce de las avenidas El Olivar y Pacasmayo. Al lugar ambién llegó Cristhiam Camacho y se hospedó en el cuarto N.°302.

Posteriormente, Cabanillas Vilca dejó ingresar Cristhiam Camacho al cuarto y él con un cuchillo en mano amenazó a Diego Chocca con hacerle daño si no le daba su celular y su billetera.

Cuando encontró las tarjetas bancarias del agraviado, le devolvió su teléfono y lo obligó a entrar a las aplicaciones para realizar transferencias y sacar préstamos que en total ascendieron a S/ 11,550.00.

Como no pudieron transferir el dinero de una de las tarjetas porque estaba configurado solo para compras, Camacho Soto le dijo a Zuly Cabanillas que vaya a un cajero.

En este momento, Diego Chocca aprovechó para enviar su ubicación a su tío. Pero el extranjero se dio cuenta, le quitó su celular, le exigió que se desvistiera y cuando la víctima estuvo completamente desnuda, él se dio a la fuga.

Cabe precisar que, previamente, Zuly Celeste fue a la casa del agraviado con la excusa de conversar sobre los problemas de uno de sus familiares, ya que ellos se conocían porque habían estudiado juntos en un instituto. Luego, ambos acordaron ir al hostal.

A la mañana siguiente, la víctima fue a la agencia de uno de los bancos ubicados en el centro comercial Minka, donde vio a sus dos captores, por lo que comunicó al personal de seguridad del establecimiento, quienes los retuvieron hasta que llegó la Policía.