Callao: Menor hallada en morgue murió de un balazo

María Aybar

El cadáver de una mujer en estado de descomposición hallado el pasado 27 de junio en una zanja de una casa en construcción, en la zona de Oquendo, Callao, corresponde a una adolescente de 17 años de edad.

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El cadáver de L.S.M.M. (17), según las pericias, presenta un impacto de bala en la cabeza y tiene el rostro y cabellera quemados. 

Fue reconocido en la morgue del Callao la noche del lunes último por su madre Teodora Eulalia Macha Neyra (48), quien la había buscado en casa de familiares, amistades y hospitales.  

Los tatuajes que tenía la víctima, uno de ellos con su nombre en la cintura y otro en la pierna a la altura de la pantorrilla con la frase “un atrapa sueños”, fueron  determinantes para dar con la identidad de la menor, que se encontraba desaparecida desde el pasado 16 de junio y fue internada en la morgue el lunes 27 de junio.

PRINCIPAL SOSPECHOSO 

Las primeras investigaciones de los agentes de homicidios de la Divincri-Callao hacen suponer que la jovencita fue asesinada de un balazo en la cabeza por su enamorado. 

Según la familia, el presunto asesino sería Scainer, también conocido como Monito, quien es su vecino mantenía un romance con la jovencita hace un mes. El sospechoso se encuentra desaparecido.

VIVÍA AMENAZADA

Vecinos y testigos contaron que la relación era tormentosa, por cuanto la adolescente llegaba a su vivienda con moretones y golpes en diversas partes del cuerpo. 

“Siempre decía que se había golpeado, que se había caído, pero tenemos entendido que el enamorado la golpeaba”, dijo una de sus primas que evitó identificarse. Incluso la amenazaba de muerte y le enviaba fotos con balas en Facebook para amedrentarla. Según los deudos, sería un sujeto de malvivir, que tras cometer su delito habría escapado.

MADRE PIDE JUSTICIA

La mañana de ayer, la agobiada madre de L.S.M.M. pidió que la policía atrape al asesino. Dijo que la fallecida era la mayor de sus cuatro hijos y que por motivos familiares vivía con su abuelita, Victoria Neyra Ferrer (71).  

La septuagenaria contó que la última vez que vio a su nieta fue el pasado 16 de junio cuando salió a una fiesta tras recibir una llamada, presuntamente del enamorado, pero nunca más regresó.

ABANDONÓ EL COLEGIO

Los agentes de la Divincri Callao cuentan con las fotografías del presunto asesino y realizan diligencias para ubicarlo. 

Las autoridades interrogaron a la abuelita de la víctima adolescente, Victoria Neyra Ferrer (71), quien dijo que vio por última vez a su nieta el pasado 16 de junio, días antes del Día del Padre, cuando se despidió y dijo que iba a una fiesta. 

Al parecer el enamorado la llamó por teléfono cuando se encontraba descansando en su vivienda de la Mz. O, lote 7, calle Los Héroes del Pueblo, en Condevilla, San Martín de Porres. 

La menor nunca más regresó y como solía desaparecer varios días, la septuagenaria pensó que se encontraba en casa de una amiga.

Nunca imaginó que su nieta, que tuvo que dejar el colegio por problemas económicos, yacía presuntamente secuestrada y asesinada por el enamorado. 

Según la policía, el homicida se deshizo del cadáver de la muchacha al abandonarlo en una desolada zona y antes lo habría intentado quemar. No descartan que haya contado con ayuda.