Sufre aborto espontáneo en su centro de trabajo y es obligada a seguir laborando en tienda de EE. UU.

Una mujer experimentó un doloroso episodio luego de sufrir un aborto espontaneo en su centro de trabajo. Y es que la empresa donde laboraba tuvo una indignante reacción tras conocer su grave situación. El hecho ocurrió en Estados Unidos.

¿Qué hicieron? La joven vivió los momentos más terribles de su vida después de sufrir el aborto de su bebé. No obstante, el dolor por la pérdida de su hijo se intensificó cuando su trabajo la forzó a que siguiera cumpliendo sus actividades en una sección de ropa para bebés, pese a la grave situación en la que se encontraba en ese momento.

Este indignante caso fue publicado en Twitter por una persona que habló con la joven afectada en EE. UU. “Le pregunté a la chica sobre su día y dijo que estaba luchando porque acababa de tener un aborto espontáneo y la hicieron trabajar en la sección de bebés”, escribió en la red social, generando la indignación de miles.

Se identificaron con el caso

Entre los comentarios que hablaban sobre el caso de la afectada, se pronunció una abogada de Estados Unidos, quien relató el terrible caso que vivió tras sufrir un aborto en el séptimo mes de embarazo, faltando pocas semanas para dar a luz a su bebé.

“Tuve una discusión con un abogado de la oposición en mi habitación del hospital después que mi bebé murió cuando yo tenía 7 meses de embarazo para hacerle saber que necesitaba cancelar un depósito programado para esa tarde (…) Su respuesta fue: ‘No es mi problema que seas un ataúd humano’. Todavía tengo pesadillas”, relató.

Otras usuarias denunciaron que algunas empresas son cero empáticas con sus colaboradoras. “Vi cómo le gritaban a una chica con la que solía trabajar por insistir en dos semanas libres (sin paga) después de un aborto espontáneo (…) Trabajamos en una guardería”.

EE. UU. tiene la tasa de mortalidad materna más elevada

Según Yahoo News, Estados Unidos es el país que cuenta con la tasa más elevada de mortalidad materna, debido a los escasos programas de salud pública. Asimismo, las trabajadoras no cuentan con licencia remunerada por maternidad y solo el 20% tiene acceso al sector privado de este tipo de atención.